Prof. Osama Hamdan: Los jóvenes palestinos necesitan tener esperanza

El académico de Jerusalén describe la falta de expectativas a futuro que vive la juventud. La huida a través del estudio, la emigración. Algunos eligen la muerte y el terrorismo.

Jerusalén (AsiaNews) – A causa de la difícil situación económica y política, los jóvenes palestinos no tienen expectativas a futuro. Esto los lleva a una desesperación y a la búsqueda de una vía de escape a través del estudio y la emigración. Y cuando no encuentran salida, optan por la muerte y el terrorismo.

Cisjordania cuenta con un alto porcentaje de jóvenes. El Palestinian Central Bureau of Statistics (PCBS) informa que, en el año 2016, el 36,9% de la población tenía menos de 15 años de edad, y el 30% entre 15 y 29 años. En esta última franja etaria, la tasa de desocupación llega al 39%. El profesor Osama Hamdan, 57 años, docente de Restauración Arquitectónica en la Universidad de Al-Quds en Jerusalén, cuenta cuáles son sus dificultades: “En comparación a nuestra generación, tienen una vida más difícil. Un poco como sucede a los jóvenes en Europa. A esto se suman todos los problemas generados por la situación política. Tienen poca esperanza, poca confianza”.

Hamdan habla de la esperanza de sus estudiantes de hallar un trabajo, quizás prosiguiendo los estudios con un máster o un doctorado. Sin embargo, el PCBS afirma que en 2016 sólo el 16% consiguió trabajo. Esto los empuja a intentar dejar el país. En Cisjordania, según la misma fuente, el 15% ha declarado que quiere irse; el 73% éstos, de manera temporaria. “Es cierto que quieren dejar el país, ¿pero cómo hacerlo?”, se pregunta Hamdam. “No hay vía de escape. Los que lo logran, se dirigen a los países del Golfo. Nuestras cerebros importantes están allí, porque el gobierno no ha sabido retenerlos”.

La violencia y los continuos conflictos plasman las nuevas generaciones. “Si durante 24, 25 años vives experiencias de este tipo, es difícil esperar algo mejor, es más fácil dejarse llevar y cerrarse. El hecho de que “árabe” esté asociado con “terrorismo” no ayuda para nada. La cerrazón se torna violencia. Si arrojas un gato contra un muro, éste puede rasguñar”.

En efecto, los enfrentamientos y agresiones en los Territorios ocupados y en Israel se han intensificado. Según Hamdan quienes perpetran estos ataques, que llegan a ser “incluso jovencísimos”, buscan la muerte. “Si te enfrentas a un soldado que está armado hasta los dientes usando un par de tijeras, no puedes encontrar nada más que la muerte”. Esto es lo que le sucedió a Abdul Fatah al-Sharif, un joven palestino de Hebrón, que fue asesinado mientras yacía en tierra. Su muerte dividió las aguas en Israel en cuanto a la responsabilidad que cabía al soldado israelí, que fue condenado a 18 meses de detención.

Según el académico, “lo que necesitan los jóvenes es esperanza, paz y respeto”. Muchos trabajan con él, que “dentro de sus pequeñas posibilidades” trata de ayudarlos. En particular, a través de proyectos de formación del Mosaic Centre de Jericó, una ONG de la cual él es director, y que protege y promueve el legado cultural palestino. “Para ellos, la esperanza es encontrar un trabajo, algo que les agrade: cosas bellas, el arte, la cultura. Son todas cosas que podrían convertirse en un puente entre las religiones, y entre lo antiguo y lo nuevo”.