Phnom Penh, Hun Sen: contra la disidencia, acciones legales o garrotazos

de Steve Suwannarat

Se han programado elecciones generales para julio, pero en estos días el primer ministro explicó cómo actuará frente a la disidencia, poniendo una vez más de manifiesto que el país no se encamina hacia la democracia. Durante todo el año pasado Camboya fue presidente rotativo de la ASEAN, lo que generó preocupación en la comunidad internacional, y poco cambiará cuando Indonesia asuma la presidencia.

Phnom Penh (AsiaNews)- Tras décadas de controlar el país con puño de hierro, el primer ministro Hun Sen ha desafiado a quien sea a criticar a su partido, Pueblo camboyano, de cara a las elecciones previstas para el próximo mes de julio, y señaló lo que la oposición cree que son los dos métodos que el autócrata que se propone utilizar para eliminar cualquier disidencia: “¿Qué prefieren? ¿Enfrentar medidas legales en los tribunales o que yo saque a los partidarios del PPC a las calles para que los muelan a palos?”, preguntó provocativamente el líder camboyano.

El recurso a la violencia para perseguir a los que critican al régimen ha sido una constante durante el gobierno de Hun Sen. En 2017 disolvió el Cambodia National Rescue Party, (CNRP), el único partido de la oposición que quedaba. Donde no llegaban las presiones, las amenazas, la cárcel o el exilio de los opositores, ha llegado un poder judicial que responde a la voluntad (y las represalias) del líder. Tanto el ex presidente del CNRP, Sam Rainsy, como su vice, Mu Sochua, se han visto obligados a vivir en el exilio, mientras que Kem Sokha, que permaneció en el país y fue encarcelado en 2017, fue puesto en libertad dos años después con la obligación de no salir del país ni participar en actividades políticas mientras tenga abierta una causa por traición.

“Aunque se acercan las elecciones generales en Camboya, la ASEAN [Asociación de Naciones del Sudeste Asiático] y toda la comunidad internacional no deben dejarse engañar y pensar que pueden llegar a ser un proceso democrático, considerando las condiciones imperantes en el país”, dijo Mercy Barends, miembro de la Cámara de Representantes de Indonesia y parlamentario de la ASEAN para los derechos humanos. "Deberían presionar más al gobierno camboyano para que libere sin condiciones a los presos políticos, para que ponga fin a la campaña de persecución contra la oposición y para que actúe de acuerdo con las disposiciones del Acuerdo de paz de París, firmado en 1991 y concebido para encaminar al país por la senda democrática.".

Durante todo el año pasado Camboya ocupó la presidencia rotativa de la ASEAN, cuyo lema fue "ASEAN ACT: Addressing Challenges Together". Sin embargo, las relaciones de Hun Sen con la Junta militar en el poder en Myanmar (empezando por su visita a la capital birmana Naypyidaw al comienzo de su mandato), la tibia postura de la organización sobre el conflicto en Ucrania y las dificultades para definir una posición unívoca frente a China manteniendo una ambigüedad estratégica hacia Taiwán, han acentuado las presiones y sospechas internacionales. La presidencia de Indonesia, que comenzó con la cumbre del 13 de noviembre de 2022, podría traer más claridad con respecto a la identidad democrática de la Asociación y un mayor compromiso para contrarrestar los impulsos autoritarios en su seno.