Patriarca católico de Alejandría: La visita del Papa Francisco marcará una renovación de la Iglesia en Egipto

de Loula Lahham

Amba Ibrahim Isaac explica su alegría por la venida del Papa Francisco y sus inquietudes en relación a su país, azotado por el terrorismo. Los vínculos fraternos con Teodoro II y las relaciones con Al Azhar y con el presidente Al Sisi. La renovación de la Iglesia con nuevas instituciones, en la labor social y en la valorización de los laicos, tanto hombres como mujeres.

El Cairo (AsiaNews) - Amba Ibrahim Isaac es el patriarca católico de Alejandría, cabeza espiritual de cerca de 300.000 católicos egipcios que se disponen a recibir al Papa Francisco dentro de tres días. En efecto, la visita del pontífice será los próximos 28 y 29 de abril.

Amba Ibrahim Isaac nació en la localidad de Béni-Choqeir en Assiout, hace 62 años. En 1980 fue ordenado sacerdote y en 1988 obtuvo el doctorado en ciencias teológicas. Luego de desempeñarse como rector del seminario copto católico, en el año 2002 fue nombrado obispo de la diócesis de Menia. En 2013 se convirtió en patriarca de Alejandría de los coptos católicos.

A continuación, la entrevista que él concedió a AsiaNews.

Su Beatitud, ya desde el primer anuncio de la visita del Papa Francisco a Egipto, usted parecía confiado e incluso para nada sorprendido. ¿Qué sucedió en el Vaticano?

Para nosotros, el anuncio de la visita no fue una sorpresa. Cada vez que me reuní con Su Santidad en Roma lo invité a visitar Egipto. Durante nuestro último encuentro en febrero, le presenté la invitación oficial. Luego supe que el presidente de la República, el Papa Teodoro y el gran imán Al Tayyeb habían hecho lo mismo. Y así, en solamente tres días él estará con nosotros. Pienso que, además de la ventaja que suponen los resultados mediáticos, políticos y turísticos, la visita suscita una gran alegría y será una gran bendición para Egipto y para la Iglesia de Egipto en general.

La presencia del Papa en nuestro país provocará gran aliento y será un gran impulso espiritual. La misma también coronará el diálogo con nuestros hermanos musulmanes. Por esta razón, hemos creado un eslogan y un logo que comprende las pirámides, la esfinge, una cruz y una media luna, con palabras que han sido bien elegidas: « el Papa de la paz viene al Egipto de la paz».

Con esta histórica visita, nuestro pueblo será invitado a emprender un camino espiritual dentro de la Iglesia católica, para reencontrar su rol de pionera y su vivacidad, tal como era en el pasado. Venir después de Pascua es también subrayar una renovación de la Iglesia católica egipcia, algo que es tan esperado.

¿Qué piensa usted de los actos de terrorismo perpetrados contra los cristianos de Egipto?

A decir verdad, estoy muy inquieto por el Egipto. ¿Hasta cuándo se prolongará esta ola de violencia en Egipto y en el mundo? Aquí donde estamos tenemos una ley, pero ésta no es aplicada. Y cuando no se aplica una vez, dos veces, la violencia se convierte en costumbre. Si queremos cambiar las cosas, ante todo debieran cambiarse las mentalidades, y no el discurso religioso. Un discurso fácilmente puede hablar de amor y de tolerancia, y no obstante seguir conservando una mentalidad resentida. Es imperativo cambiar el modo de pensar de las personas. Esta es la única solución que puede conducir a la paz.

¿Cómo están las relaciones con el papa copto Teodoro II?

Tengo una excelente relación con él. El Papa Teodoro es como un hermano mío. Y también es un gran amigo espiritual. Cada vez que converso con él siento su sinceridad y su amabilidad. A mi ordenación él asistió, y vino acompañado por cinco obispos suyos.

¿Y con Ahmad Al-Tayeb, el gran imán de Al Azhar, y el presidente Abdel-Fattah Al-Sisi?

Con el gran imán de Al Azhar (la máxima autoridad sunita), solamente mantengo relaciones oficiales. Con el presidente Al-Sisi me he reunido dos veces: la primera, en el palacio presidencial, y en la otra, le presenté mis condolencias por el fallecimiento de su madre. Pienso que habré de encontrarme una tercera vez con la visita del Papa Francisco. Es amable, respetuoso y toma muy a pecho sus responsabilidades.

¿Cuáles son los proyectos del patriarcado copto católico en el 2017?

En mi quinto año de consagración patriarcal, quisiera trabajar para dar más instituciones a la iglesia copta católica. Eso significa un nuevo consejo pastoral, la creación de un tribunal especial para los asuntos eclesiásticos y la centralización de la contabilidad. También estamos pensando en dividir las grandes diócesis egipcias en algunas diócesis más pequeñas. Y para hacer esto, necesito ordenar a algunos nuevos obispos.

¿Y desde el punto de vista humano?

Quisiera consagrar mayor energía a la formación de los jóvenes, especialmente de aquellos que están en el ciclo secundario y de los que están en el período intermedio, entre las clases preparatorias y las universitarias, de los cuales nos hemos desinteresado de manera involuntaria.

¿Está satisfecho con el trabajo social de los cristianos?

Caritas y la Asociación del Alto Egipto, junto a otros actores del desarrollo social, trabajan de modo independiente los unos de los otros. Pienso que tendríamos que crear una entidad que englobe todo el trabajo de desarrollo social y humanitario que se lleva adelante entre los más desfavorecidos en El Cairo y en el Alto Egipto. Hay mucho que hacer en este país, y mis sacerdotes no pueden hacer todo.

¿Qué rol juegan los laicos en su Iglesia?

Yo cuento mucho con la participación de los laicos. Y espero de ellos no sólo recibir ayuda financiera, sino sobre todo sus ideas, su tiempo, su esfuerzo. Ellos deben trabajar con las manos en la masa, como nosotros y con nosotros. Es un deber de los laicos presentar alternativas, y no contentarse sólo con criticar. Cuando hablo de laicos, hablo de hombres y mujeres. Una mujer con una buena formación sin lugar a dudas será elegida para dirigir cualquier oficina, y lo hará mejor que un hombre medianamente calificado.