Patriarca Laham: los muertos en las cárceles sirias, un nuevo frente de la “guerra de la información”
Según Amnesty International, 18.000 personas han muerto en las cárceles del gobierno sirio. El responsable de la Iglesia greco melquita habla de noticias que están siendo manipuladas, porque “no hay acceso a las cárceles” y por ende, no puede verificarse la información. Son revelaciones “teñidas de política”, agrega. El intento de detener el nuevo eje Moscú-Teherán-Beijing. Campamentos de verano y retiros espirituales en las áreas que han sido pacificadas.
Damasco (AsiaNews) - Una "guerra de la información” hecha a base de mentiras, proclamas, presuntas revelaciones, y que corre de manera paralela a los “combates con las armas”, para distraer y manipular a la opinión pública internacional y a la población local. Es lo que afirma a AsiaNews el Patriarca melquita Gregorio III Laham, al comentar la noticia según la cual al menos 18.000 personas habrían muerto por las torturas y privaciones sufridas en las cárceles del gobierno sirio desde el inicio del conflicto en marzo de 2011. “¡Cómo puede creerse en esta cifra, en la precisión de los datos –se pregunta el prelado- si no se tiene acceso a las cárceles, y si para basarse se toman sólo algunos testimonios parciales!”.
En las últimas horas, Amnesty International (AI) ha difundido un informe en base al cual surge que desde 2011 hasta diciembre de 2015 se registraron “cuando menos 18.000” víctimas en las prisiones sirias. La denuncia es fruto de los relatos de 65 “sobrevivientes a las torturas”, según los cuales habría “un uso sistemático” de la tortura, de la violación y del maltrato por parte de los guardias carcelarios.
El gobierno sirio ya ha rechazado con fuerza el informe, negando las acusaciones de torturas y las estimaciones relacionadas con los muertos en prisión, que equivaldrían a 300 víctimas por mes.
Por otro lado, el documento de AI también habla acerca de abusos sexuales cometidos durante los operativos de control, la mayoría de las veces perpetrados por parte de guardias masculinos contra mujeres detenidas. Además, a los presos se les niega la atención médica y no pueden higienizarse adecuadamente para prevenir así la propagación de enfermedades.
Para el jefe de la Iglesia greco-melquita “no es posible probar” estas cifras y tampoco verificar la “veracidad” de esta información. Por otra parte, la fuente Amnesty International “no es tan independiente” en el contexto del conflicto sirio, puesto que “frecuentemente se ha verificado que ha habido una manipulación de las noticias”. “Estas [presuntas] revelaciones – agrega el patriarca – están teñidas de un color político, en el contexto de una guerra de información, como ocurrió en el pasado con la cuestión de las armas químicas”.
Gregorio III habla de una “maniobra” en curso para desacreditar “al gobierno sirio y a Rusia” en un momento en que está surgiendo un nuevo eje - Moscú, Teherán, Beijing – que es capaz de contrastar las ambiciones estadounidenses en el área. “Esta es otra partida –refiere- en el marco de la ‘guerra’ entre los Estados Unidos y Rusia”.
Una valoración, cuenta el prelado, que comparte gran parte de la población siria, la cual se siente víctima “de una guerra sucia” que, en cinco años, ha causado 250.000 muertos y 11 millones de evacuados o desplazados. “Los patriarcas hace tiempo que decimos que una verdadera alianza internacional puede derrotar al terrorismo –afirma Gregorio III -, pero existen intereses contrapuestos”. La única “voz que dice la verdad” es la del Papa Francisco, que no se cansa de “hacer llamamientos por la amada Siria”, y que denuncia la hipocresía de una comunidad internacional “que habla de paz, pero luego vende armas” a las partes en lucha.
“En realidad –prosigue el patriarca- la situación en algunas áreas de Siria que están bajo el control del gobierno, como es el caso de Damasco y de Homs, es de relativa calma, y desde el mes de febrero que no se registran graves episodios de violencia. Los mayores problemas están en la frontera con Turquía y en Alepo, metrópoli que es víctima de la destrucción, de bombas, de una devastación. El 50% de la población ha huido de la ciudad, que se prepara para vivir la madre de todas las batallas”. Una situación crítica también se registra en Madaya, donde habría cuando menos 40.000 habitantes necesitando atención médica. “El área está siendo asediada por Daesh [acrónimo árabe para el Estado islámico] y por las fuerzas gubernamentales –explica- y la ayuda humanitaria no llega; además, los terroristas se mezclan entre los ciudadanos y usan a los civiles como escudos humanos, como sucedió en Palmira y en Homs en el pasado”.
En tanto, aprovechando el mejoramiento de la situación, la Iglesia de Damasco ha organizado campamentos scout, momentos de encuentro y esparcimiento para los jóvenes. “El patriarcado greco-melquita, en colaboración con UNICEF –prosigue Gregorio III- la lanzado un programa escolar para los niños. Se trata de 45 centros esparcidos por el territorio, capaces de acoger a 13.000 niños y de garantizarles su derecho a estudiar”. Por último, el patriarcado también ha organizado jornadas de oración y de retiro espiritual, a fin de que “también el alma pueda encontrar consuelo para aliviar los traumas de la guerra”.
12/01/2016
08/01/2016
19/01/2016 10:47