Pareja cristiana asesinada en Kandhamal: “Clara culpabilidad de la policía”
Mumbai (AsiaNews)- Un claro homicidio de 2 cristianos inocentes por parte de la fuerzas de seguridad de Kandhamal. Es cuánto declara el equipo de investigación encargado de investigar sobre la muerte de Dubeswar Nayak y su mujer Bhubudi, asesinados el 26 de julio pasado cerca del pueblo de Pangalpadar, donde vivían. AsiaNews recibió los primeros informes redactados por el equipo de investigación, que fue al lugar el 30 de julio. Los testimonios recogidos contradicen la versión dada por las autoridades, que han hablado de un “incidente”, fruto de una operación anti-maoístas.
Pangalpadar se encuentra en una zona remota de Kotagada block, en el distrito de Kandhamal. El centro es tan lejano que ni siquiera tiene una ruta principal que lo una a la sede principal del gobierno local. De las 100 familias que viven allí, el 755 está constituido por tribales de etnia kondh, el resto por dalit (“fuera de casta”). La mayoría trabaja como obreros, pero muchos- sobre todo los más jóvenes- emigraron a otros lados para trabajos mejor retribuidos. Hay una escuela que llega hasta 5° grado y de escaso acceso a los servicios médicos y eléctricos. Pocos poseen teléfonos celulares y para usarlos están obligados a subir a la cima de las colinas, atravesando los bosques de los alrededores, para poder tener señal.
Y para llamar a los familiares que el 26 de julio pasado, alrededor de las 15 hs. 5 personas se dirigieron a la colina de Dudimaha, entre los pueblos de Pangalpadar y Adipadar. Se trata de Sukant Chalanseth (48 años), Bineswar Chalanseth (40), Philimina Chalanseth (38), Dubeswar Nayak (llamado Duba, 45 años) y Bhubudi (llamada Budi, 41).
Según cuánto cuenta Sukant y Bineswar- los principales testigos oculares-después de haber terminado sus llamadas telefónicas, Bineswar llamó a Duba y a la mujer para volver al pueblo. La pareja dijo que no había terminado y que habría vuelto más tarde. En el camino hacia casa, improvisamente los primeros 3 fueron bloqueados por un grupo de fuerzas de seguridad, que se identificaron com o miembros de la Centyral Reserve Police Force (Crpf), la más grande fuerza paramilitar de India. Apuntándoles a ellos con una pistola, los agentes les pidieron los nombres y qué hacían en el bosque.
Sukant y Bineswar han explicado que habían llamado a sus parientes y que sobre la colina estaba aún una pareja de amigos, que habría vuelto más tarde. Las fuerzas del orden no hicieron preguntas a Philimina y allí los dejaron ir. Una hora más tarde, alrededor de las 17, los 3 y otros miembros del pueblo escucharon disparos, que provenían de la misma zona del bosque donde se encontraban antes.
La comunidad discutió la posibilidad de ir a buscar a la pareja de amigos, pero por miedo decidieron esperar hasta la mañana siguiente. Esa noche Duba y Budio no volvieron a casa.
Como ha relatado Lahasa Rupamajhi, líder de la aldea, a la mañana siguiente (27 de julio) la comunidad ha ido en la búsqueda de la pareja. En la colina, donde fue visto por última vez, se encontraron manchas de sangre y el vestido de la mujer. Contactado e informado de la situación el inspector a cargo de Kotagada, el oficial les dijo que recogieran por sí mismos las pruebas encontradas y las llevarán a la comisaría. Los habitantes se negaron.
Después de consultar con el jefe del consejo de la aldea, Lahasa, Sukant y Bineswar - junto con un pequeño grupo de personas - fueron a la comisaría de Kotagada y presentaron una denuncia. Sin embargo, el inspector a cargo se ha negado a aceptar la demanda, argumentando que el caso debe ser manejado por una autoridad superior a la suya. En ese momento, la comunidad realizaron una protesta frente a la estación de policía, exigiendo que los cuerpos de las dos víctimas fueron devueltos a sus hijos.
Ante el silencio de la policía, el día siguiente a la comunidad bloqueó una carretera después de 36 horas de protesta, en la tarde del 28 agentes han entregado los cuerpos a los hijos de las víctimas, prometió una compensación de 200.000 rupias, y donó inmediatamente 20.000 rupias para gastos funerarios.
La pareja ha fallecido tenía seis hijos, tres mujeres (Junusi, la mayor, 27 años; Minu, 22; Elisabet, la más pequeña, 11) y tres varones (Rahul, 25, Saúl, 19; Pablo, 16). Es a Rahul, Saúl y Pablo que los padres han llamado por teléfono antes de morir. Los dos primeros viven y trabajan en Kerala, el segundo en Hyderabad.
Al equipo de investigación, Rahul dijo que habló con los padres en torno a 16:30. De repente, oyó un sonido poco natural que venía de su madre. Al no entender lo que estaba sucediendo, él trató de pedir a su padre, pero su voz fue ahogada.. "He oído a algunas personas que atacan físicamente a mi madre - informó - tal vez un intento de violación. Y cuando mi padre trató de protegerla, también lo atacaron". Después de escuchar estos ruidos, alguien apagó el teléfono. Cuando trató de llamar, una voz pregrabada diciendo que el celular no era "accesible".
Rahul intentó de nuevo esa noche. Al principio, el teléfono sonó cinco veces. Finalmente se apagó. "Sólo el 27 por la mañana he sabido que habían desaparecido. Mis hermanos y yo tomamos el primer tren disponible y nos fuimos a casa".
29/08/2020 11:22
16/08/2017 12:32