Papa: p. Czerny, el Mensaje por la paz llama a velar por nuestra casa en común

“Los responsables de la cosa pública debieran adoptar medidas prácticas para acoger, proteger, promover e integrar: es su deber hacerlo, dentro de los límites permitidos por el bien común correctamente entendido, así como también favorecer la inserción en la sociedad de los recién llegados”. “Al mismo tiempo, los recién llegados no deben olvidar que tienen el deber de respetar las leyes, la cultura y las tradiciones de los países que los reciben”.

Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- Va encuadrado en “el cuidado de la casa común” el mensaje del Papa Francisco para la Jornada mundial de la paz, en cuanto, como sucede en la familia, los responsables de la cosa pública “tienen el deber de dirigir las complejas situaciones y los rápidos cambios y de asignar los recursos limitados”. Esto lo evidenció el p. Michael Czerny, sj, sub-secretario de la Sección emigrantes y refugiados del Ministerio para el servicio del desarrollo humano integral, que intervino en la presentación del documento papal.

“La compasión, abrir nuestros corazones a los hermanos y hermanas que buscan un lugar seguro en el cual vivir en paz-explicó- es esencial, pero no basta”. Ella, “debe ser acompañada por la prudencia, entendido en sentido latino: el discernimiento capaz de gobernar las acciones humanas. Acoger realmente a los otros exige un compromiso concreto y formas eficaces de apoyo, para llegar a la integración. La vida familiar es un óptimo ejemplo. Cada componente de la familia tiene sus necesidades. Los padres deben saberlos distinguirlos de los caprichos. Los padres “prudentes” responden a las necesidades asignando los recursos sobre sus bases. Si los recursos son insuficientes, modifican los objetivos-no bloquean o expulsan a los miembros que tiene demasiadas necesidades”.

Y como en la familia, los responsables de la cosa pública “necesitamos que sean tan compasivos cuanto ‘prudentes’, capaces de atención y de saber ocuparse. Los responsables de la cosa pública deberían adoptar medidas prácticas para acoger, proteger, promover e integrar: es deber de ellos hacerlo, en los límites consentidos por el bien común rectamente entendido, como también favorecer la inserción en la sociedad de los nuevos llegados”. “Al mismo tiempo, los recién llegados no deben olvidar que tienen el deber de respetar las leyes, la cultura y las tradiciones de los países en los cuales son recibidos”.

“¿Con cuáles medios, la comunidad civil y religiosa puede acoger, proteger, promover e integrar a los nuevos llegados? Cualquier medida sea adoptada, deberá tener justamente en cuenta de quien ya vive en el territorio. Esto podría llevar a recursos provenientes del exterior. Por ejemplo, los países más ricos deberían demostrarse más generosos en las donaciones en favor de los lugares donde muchos que piden asilo o un refugio, ya sea temporáneamente o por períodos más largos”.

“Para apoyar el importante proceso de reflexión y discernimiento en curso, el Mensaje de la Jornada Mundial de la Paz de este año nos invita a considerar emigrantes y refugiados como hombres y mujeres que buscan, llevan y construyen la paz”.