Papa: el pesebre y el árbol de Navidad, incluso para los no creyentes "hablan de la fraternidad, la intimidad y la amistad"
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - El pesebre y el árbol de Navidad evocan el misterio
de la encarnación, incluso para aquellos que no creen "hablando de la
fraternidad, la intimidad y la amistad, llamando a los hombres de nuestro
tiempo para redescubrir la belleza de la simplicidad, del compartir y de la
solidaridad". Lo dijo el Papa Francisco en el encuentro que tuvo esta
mañana con delegaciones de Verona y Catanzaro, dando gracias por el don del
pesebre y el árbol de Navidad en la Plaza de San Pedro, que Francisco inauguró esta
tarde.
"El pesebre y el árbol de Navidad - dijo el Papa - El
pesebre y el árbol de Navidad son signos navideños siempre
sugestivos y queridos para nuestras familias cristianas:
evocan el Misterio de la encarnación, el Hijo unigénito de Dios hecho hombre
para salvarnos y la luz que Jesús ha traído
al mundo con su nacimiento. Asimismo el pesebre y el árbol tocan el corazón
de todos, también el de los que no creen, porque hablan de fraternidad,
intimidad y amistad, llamando a los hombres de nuestro tiempo
a redescubrir la belleza de la sencillez, del compartir y de la solidaridad.
Son una invitación a la unidad, a la concordia y a la paz. A hacer un espacio,
en nuestra vida personal y social, para Dios, que no viene con arrogancia a
imponer su poder, sino a ofrecer su amor omnipotente a través de la frágil
figura de un Niño. Por lo que el pesebre y el árbol traen un mensaje
de luz, esperanza y amor.".
"Para vosotros, aquí presentes, a vuestras familias ya todos los
habitantes de sus regiones, Veneto y Calabria, la esperanza de pasar la Navidad
con la serenidad y la intensidad del Señor. Él, el Mesías
se hizo hombre y vino entre nosotros para disipar las tinieblas del error y del
pecado brindando a la humanidad su luz divina. El mismo Jesús
dice: 'Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino
que tendrá la luz de la Vida' (Jn 8,12) ¡Sigámoslo a
Él, luz verdadera, para no perdernos y para reflejar a nuestra vez luz
y calor sobre cuantos atraviesan momentos de dificultad y oscuridad interior!".
El árbol de Navidad que Francesco encendió esta tarde tiene más de 25 metros de
altura y tiene un ancho de corona de unos 10 metros. El pesebre se compone de veinte
estatuas de terracota de tamaño natural, con ropa y accesorios hechos de un
material resistente a la intemperie.
Después del pesebre y el árbol de Navidad, el Papa también puso en marcha la
nueva iluminación de la fachada y la cúpula de la Basílica de San Pedro. La
nueva iluminación se compone de 315 nuevas luminarias y leds que, entre otras cosas,
permite un ahorro de consumo de energía.
23/12/2015
23/12/2020 11:47