Papa: con quien busca sólo el escándalo y la división la respuesta debe ser el silencio
Francisco retomó la celebración de la misa diaria en la capilla de S. Marta. La actitud de Jesús en la sinagoga de Nazaret enseña que “la verdad es mansa y humilde, la verdad es silenciosa, la verdad no es ruidosa”. No es fácil lo que dijo Jesús; pero está la dignidad del cristiano que está anclada en la fuerza de Dios”.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- “Con las personas que buscan sólo el escándalo y la división la respuesta debe ser el “silencio”y la “oración”. Lo dijo hoy el Papa Francisco, retomando la celebración de la misa en la capilla de S. Marta. El Papa partió del Evangelio de hoy, Lucas (Lc 4, 16-30), en el cual Jesús, volviendo a Nazaret, es recibido con curiosidad y luego expulsado.
Llegado a la sinagoga, Jesús fue recibido con un gran curiosidad: todos quieren ver las grandes obras que realizó en otras tierras. Pero Jesús usa sólo “la palabra de Dios”, una costumbre que adopta también cuando “quiere vencer al Diablo”. Y es justamente esta actitud de humildad que lleva a un cambio de atmósfera, “de la paz a la guerra”, “del estupor a la cólera”. Con “su silencio” Jesús vence a los “perros salvajes”, vence al “diablo” que “había sembrado la mentira en el corazón”.
“No eran personas, eran un una jauría de perros salvajes que ,lo echaron fuera de la ciudad. No razonaban, gritaban. Jesús callaba. Lo llevaron al borde de la montaña para tirarse por el despeñadero. Este pasaje del Evangelio termina así: ‘Pero Él, pasando en medio de ellos, se puso en camino’. La dignidad de Jesús: con su silencio vence a aquella jauría salvaje y se va. Porque no había llegado todavía la hora. Lo mismo sucederá el Viernes Santo: la gente que el Domingo de Ramos los había festejado y les habían dicho ‘Bendito, Tú, Hijo de David’, decía ahora ‘crucifícalo’: habían cambiado. El diablo había sembrado la mentira en el corazón y Jesús permanecía en silencio”.
“Esto-comentó Francisco- nos enseña que cuando existe este modo de obrar, de no ver la verdad, queda el silencio”. “El silencio que vence, pero a través de la Cruz”. “El silencio de Jesús”. “Pero cuántas veces en las familias comienzan las discusiones sobre política, deportes, sobre el dinero y una y otra vez las familias terminan destruidas, en estas discusiones en las cuales se ve que el diablo está allí que desea destruir...Silencio. Dar su propia opinión y callar. Porque la verdad es mansa, la verdad es silenciosa, la verdad no es ruidosa. No es fácil lo que dijo Jesús; pero está la dignidad del cristiano que está anclada en la fuerza de Dios”.
Con las personas que no tienen buena voluntad, con las personas que buscan sólo el escándalo, que buscan sólo la división, que buscan solamente la destrucción, también en las familias: silencio. Y oración”.
“El Señor-concluyó- nos dé la gracia de discernir cuándo debemos hablar y cuándo debemos callar. Y esto por toda la vida: en el trabajo, en casa, en la sociedad… en toda la vida. Así seremos más imitadores de Jesús”.
23/06/2021 12:55