Papa: no nos quedemos en el presente, miremos a Dios que es nuestra meta

En el Regina Caeli, Francisco recordó a los fieles que la fe no es "un paquete de ideas", sino un camino que se hace junto con Jesús. En la víspera de la súplica a la Virgen de Pompeya, invitó a seguir rezando el Rosario por la paz en Ucrania: "Que los líderes de las naciones escuchen el deseo de la gente que sufre y quiere la paz".

Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - “La fe en Jesús no es un 'paquete de ideas' para creer, sino un camino para recorrer junto con Él”, dijo hoy el Papa Francisco a los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro para rezar el Regina Caeli.

Comentando un pasaje del Evangelio de Juan que hoy propone la liturgia, tomado del último discurso de Jesús antes de su muerte, el Papa Francisco observó que Jesús habla a los discípulos atribulados señalándoles la meta y la manera de alcanzarla. "Él ve que tienen miedo de ser abandonados -comentó- igual que nos sucede a nosotros cuando nos vemos obligados a separarnos de alguien a quien amamos". Pero Jesús "no se separó de nosotros, nos abrió el camino, anticipándose a nuestro destino final: el encuentro con Dios Padre, en cuyo corazón hay un lugar para cada uno de nosotros”.

Incluso cuando experimentemos fatiga, desconcierto y fracaso -añadió- "no debemos perder de vista la meta. Pero hoy corremos el riesgo de olvidarlo, de olvidar las preguntas últimas, las que son realmente importantes: ¿hacia dónde vamos? ¿Hacia dónde caminamos? ¿Para qué vale la pena vivir? Sin estas preguntas, comprimimos la vida solo en el presente, pensamos que tenemos que disfrutarla al máximo, y terminamos viviendo al día, sin un propósito, sin una meta".

¿Y cómo hacemos para alcanzar ese objetivo? “A veces, sobre todo cuando hay que afrontar grandes problemas, uno tiene la sensación de que el mal es más fuerte”. Pero Jesús nos dice que “Él mismo es el camino que debemos seguir para vivir en la verdad y tener vida en abundancia. E imitarlo, sobre todo con gestos de cercanía y misericordia hacia los demás, es la brújula para llegar al Cielo”. “Vivamos el presente – concluyó el pontífice – pero sin dejarnos desorientar; miremos al Cielo, recordemos la meta, pensemos que estamos llamados a la eternidad, al encuentro con Dios".

Al terminar la oración, Francisco recordó que mañana se celebrará en Pompeya (Italia) la rogativa a la Virgen del Rosario en el santuario que el beato Bartolo Longo quiso dedicar a la paz. “En este mes de mayo -comentó- recemos el Rosario pidiendo a la Santísima Virgen el don de la paz, especialmente para la atormentada Ucrania. Para que los líderes de las naciones escuchen los deseos de los pueblos que sufren y quieren la paz".

Por último, cuando saludó a los grupos que estaban en la plaza, el Papa dirigió unas palabras a la asociación italiana Meter del padre Fortunato Di Noto, que desde hace treinta años sensibiliza sobre el tema de la lucha contra la pederastia y la pornografía infantil en Internet. “No se cansen nunca de estar del lado de las víctimas -les dijo Francisco-, ahí está el Niño Jesús esperándolos”.