Obispos maronitas: la crisis política y la 'desintegración' de las instituciones libanesas

En la reunión mensual en Bkerké los prelados reiteran la alarma sobre el futuro del país. Existe la amenaza real de un "colapso económico y financiero" y la única respuesta es la "formación de un gobierno". Las "graves consecuencias" vinculadas al comercio ilegal. Hoy el nuncio apostólico vista al Papa.

Beirut (AsiaNews / Agencias) - El continuo vacío político, la falta de un ejecutivo estable y con plenos poderes, el enfrentamiento en los niveles más elevados entre el jefe de Estado Michel Aoun y el primer ministro a cargo Saad Hariri podría conducir a una desintegración irremediable de las instituciones libanesas, advirtió la asamblea de obispos maronitas, reunida ayer en la sede patriarcal de Bkerké, bajo la presidencia del Cardenal Beshara Raï. En los últimos tiempos el cardenal y el nuncio apostólico en Beirut, Mons. Joseph Spiteri, se han referido en reiteradas oportunidades a este peligro. El nuncio será recibido hoy en el Vaticano por el Papa Francisco precisamente para hablar sobre la "crisis existencial" en la tierra de los cedros.

En el comunicado que emitieron al concluir la reunión mensual, los obispos libaneses explican que "ante la peligrosa y apremiante situación que amenaza con un colapso económico y financiero en el Líbano, los obispos reiteran su llamamiento a los responsables para que se forme un Gobierno". A los dirigentes políticos, sigue diciendo el comunicado, los referentes de la Iglesia libanesa les piden "que dejen de lado sus cálculos y sus intereses". "El Estado - advierten - se está desintegrando de una manera que puede llegar a ser irreparable".

La Conferencia Episcopal Maronita también deplora, de manera indirecta, las pérdidas infligidas a la economía por el contrabando a Siria de productos subvencionados por el Banco Central del Líbano, sobre todo el comercio ilegal y clandestino de combustible. A continuación, los obispos ponen en guardia por "las graves consecuencias" que se derivan del uso de las reservas del banco para financiar una tarjeta bono para familias que viven por debajo del umbral de pobreza. Por último, la Iglesia local expresa su profunda preocupación por la "proliferación" de robos y asaltos, que podrían provocar un "grave caos de seguridad".

La crisis libanesa será el tema central de la reunión que tendrá lugar hoy en el Vaticano entre el pontífice y el nuncio apostólico Joseph Spiteri. En los últimos tiempos el diplomático ha expresado enérgicamente su preocupación por la progresiva ruptura del "mosaico" que ha caracterizado hasta ahora su existencia. "¿Podemos seguir hablando del Líbano-mensaje - dijo el nuncio - si la convivencia de los libaneses comienza a ser la principal fuente de dificultades?"