Obispo de Vasai: En Pascua muchos bautismos de adultos, una señal de que Jesús es un hecho real

de Nirmala Carvalho

Mons. Félix Machado habla de la ruta de conversión adoptado por muchos adultos en su diócesis. El testimonio de una chica "que habló con sinceridad a los padres, me sorprendió". Sólo el amor de Jesús empuja hacia él, y no el beneficio personal o razones egoístas. Las personas son atraídas porque Jesús "es misericordia, es gesto, palabra, voz real".

Mumbai (AsiaNews) - Durante este Año de la Misericordia, “es un hecho que muchas personas se sienten atraídos por Jesús". Lo dice Mons. Félix Machado, arzobispo de Vasai, hablando del bautismo de los adultos en su diócesis. Muchas personas este año han decidido llevar a cabo el rito de la iniciación cristiana, "para convertirse en discípulos de Jesús, pero sin negar sus orígenes". En su desesperación, el mundo de hoy, dice el arzobispo, "Jesús es el rostro de la misericordia de Dios. Las personas son tocados por él, consoladas, animadas y perdonados. Él es un misterio trascendente, pero también la historia concreta".

Mons. Machado, quien también es presidente de la Oficina para el Ecumenismo y Diálogo Interreligioso de la Federación de las Conferencias Episcopales de Asia (FABC), cuenta la historia de una joven de su parroquia, que de musulmana ha decidido convertirse. Se reunió con un grupo de jóvenes que están caminando las etapas de la Rcia [Rito de Iniciación Cristiana para Adultos - ndr].

"Esta chica - dice - ha hecho un testimonio tan emocionante de su encuentro con Jesús, que me quedé de piedra. Es una persona normal, inteligente y equilibrada. Le pregunté qué pensaban los padres acerca de su elección, y ella me reporto su diálogo - una forma muy sana de ver las cosas, muy alentadora".

Por ello, dice, "no se hace nada en secreto. Las personas están sólo consigo mismas y conoce a Cristo, a veces solo, a veces con otra persona. Pero la Iglesia no puede eludir su responsabilidad de permitir que la gente vaya al encuentro más profundo con Jesús, como testimoniaron los apóstoles".

El arzobispo añadió que los adultos que han decidido convertirse "también aman la religión de origen. Por un lado, quieren ser auténticos discípulos de Jesús, del otro no negaron su pasado y siguen construyendo el puente original que los trajo a Él".

En cuanto a la razón que impulsa a estas personas a acercarse al cristianismo, explica, "hay que tener en cuenta el mundo actual. Hoy en día la gente está desesperada y ven en Jesús el rostro de la misericordia de Dios Padre. La misericordia de Dios no es en términos abstractos. La misericordia es un gesto, una palabra, una voz, una persona real. Es eso lo que los atrajo a Jesús. Él es misterio trascendente, pero al mismo tiempo también historia concreta. Cuando la gente entra en su vida, experimentan estas cosas".

Surge la pregunta: "¿Qué derecho tiene alguien para parar esto?". La referencia es a las acusaciones de conversión forzada dirigidas contra la Iglesia, pero Mons. Machado dice que "la Iglesia prevé un largo período de preparación. Es un examen riguroso, serio durante el cual se aclaran dudas debido al encanto, egoístas motivos y así sucesivamente".

"Sólo el amor atrae a la gente - concluye el Arzobispo -. Siempre debemos estar atentos y conscientes de las formas erróneas de proselitismo, porque este es el trabajo del diablo. La gente viene a Jesús solo porque se sienten atraídos por Él. Su amor es el único camino que conduce a Él".