Obispo caldeo acompaña a Barzani en referéndum sobre el futuro del Kurdistán independiente

El líder kurdo afirma que “ha llegado la hora” de que el pueblo kurdo “tome las decisiones que le competen”. Un referéndum de consulta, para poder conocer “la voluntad” de los ciudadanos. Es favorable a esta propuesta Mons. Rabban al Qas, para quien el nuevo Estado debe tener una base laica, debe ser abierto a todas las confesiones, basado en la ciudadanía y con iguales derechos.

Erbil (AsiaNews) – Un estado civil, que abarque múltiples confesiones, que no se oriente a las diferencias entre las religiones, sino que sea capaz de valorar la riqueza de un pueblo. Para relanzar la economía y el desarrollo de un territorio, que desde hace ya demasiado tiempo es víctima de guerras y abusos, pero que ha sabido demostrar en la historia reciente que sabe resistir a la barbarie yihajista. Partiendo de estas premisas, Mons. Rabban al-Qas, obispo caldeo de Amadiya y Zakho, en el Kurdistán iraquí, en el homónimo territorio gobernado en la frontera con Turquía y Siria, está dispuesto a poyar la iniciativa promovida, en las últimas horas, por Massud Barzani. El líder kurdo afirmó que “ha llegado la hora” para convocar a un referéndum sobre la autonomía de un Estado, separado e independiente respecto a Bagdad.

“Ha llegado el tiempo y han madurado las condiciones –afirmó Barzani- para que el pueblo tome las decisiones que le competen, mediante un referéndum acerca de su futuro”. El mismo no deberá llevar “necesariamente a una declaración inmediata de independencia y al nacimiento de un nuevo Estado”, precisó el líder kurdo, sino más bien para conocer “cuál es la voluntad del pueblo del Kurdistán en lo que respecta a su futuro”.

Los peshmerga kurdos son un aliado clave de los Estados Unidos en la lucha contra el Estado Islámico (EI) en el norte de Irak y, ellos solos, durante bastante tiempo han representado la única barrera capaz de contener el avance imparable de las milicias yihadistas.

La cuestión del referéndum sobre la independencia y de las áreas que el nuevo Estado debiera cubrir –en juego hay zonas ricas en petróleo y gas natural- son una fuente de tensiones entre Erbil y el gobierno central de Bagdad, que se posiciona en contra del nacimiento de una nación kurda. Uno de los núcleos irresueltos lo conforma el área de Kirkuk, que actualmente está mayormente controlada por los peshmerga. En el último tiempo, tanto Bagdad como la región kurda, han sido atravesadas por una profunda crisis económica y financiera, agravada por el desmoronamiento de los precios del petróleo, que representa la gran mayoría de los ingresos.

Entrevistado por AsiaNews acerca de la cuestión, Mons. Rabban afirma que “ha madurado el tiempo” para el nacimiento de una realidad kurda autónoma. “El Kurdistán de hoy no es un paraíso –afirma- pero ciertamente que aquí se vive mejor que en otro lado… Aquí podemos y debemos ayudar a quien está en dificultades, mientras que Bagdad jamás ha ayudado verdaderamente a esta región, no obstante, hoy hay una mayoría árabe, especialmente en Erbil y en Dohuk”

En la región han encontrado refugio cientos de miles de cristianos que han huido de la llanura de Nínive, a la llegada del Estado islámico. Y sobre esta base puede y debe nacer una nueva realidad, de acuerdo con el obispo. "Necesitamos un Estado kurdo - continúa Mons. Rabán - que pueda reunir a todos, no separado y confesional, sino con una base laica, la ciudadanía, una Constitución de todos y para todos, con igualdad de derechos y deberes para musulmanes, cristianos, yazidis"

El prelado no ahorra críticas al gobierno central de Bagdad, que ha dejado de proteger los intereses del pueblo iraquí y que ha permitido el éxodo masivo de cristianos de la violencia, la persecución, el abuso. Aunque en los últimos años la Iglesia iraquí siempre ha promovido la unidad del país, para el prelado ahora los tiempos han cambiado. "Es justo promover el referéndum para decidir sobre la separación, para saber acerca de nosotros - concluye -, y también creo que las grandes potencias como Estados Unidos están empujando en esta dirección. Un estado kurdo que no está en contra de Bagdad, sino que sabrá ser un centro de la libertad y la convivencia ... y con todo el respeto Turquía tendrá que aceptar eso. Barzani no quiere hacer la guerra con los turcos".