Nuevo presidente de los obispos pakistaníes: "Los cristianos están en peligro por la creciente intolerancia"
Monseñor Samson Shukardin, obispo de Hyderabad, ha sido elegido para presidir la Conferencia Episcopal de ese país. Explica a AsiaNews las prioridades de la Iglesia en este momento, empezando por la defensa de una minoría "demasiado a menudo víctima de abusos". Luchar contra las distorsiones de las leyes sobre la blasfemia y acompañar a los matrimonios para hacer frente a la escalada de divorcios.
Lahore (AsiaNews)- “Mi prioridad será resolver las cuestiones relacionadas con la supervivencia misma de la comunidad cristiana”, explicó a AsiaNews Mons. Samson Shukardin, obispo de la diócesis de Hyderabad, en la provincia de Sindh, que la semana pasada fue elegido como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal de Pakistán. El prelado sucede a mons. Joseph Arshad, quien completó su mandato de tres años, y junto con todos los obispos del país afirmó que su tarea principal será la mejora de las condiciones de vida de una comunidad que con demasiada frecuencia es víctima de abusos y violencia, tanto en el lugar de trabajo como en la vida cotidiana. “La intolerancia - advirtió - ha aumentado en la sociedad y hay una desesperada necesidad de paz y armonía religiosa”.
La comunidad cristiana, el clero y los religiosos dieron la bienvenida al nuevo presidente de la Conferencia Episcopal y confían que habrá cambios positivos junto con un desarrollo de la vida de la Iglesia y una mayor presencia en la comunidad. Uno de los principales desafíos es luchar contra los abusos relacionados con las leyes sobre la blasfemia, que a menudo se utilizan para resolver disputas personales o atacar a otras personas con acusaciones falsas. El fenómeno no afecta sólo a los cristianos, sino que se verifica en muchos sectores de la sociedad paquistaní, y las franjas más débiles de la población son las que sufren las peores consecuencias. “Hay muchísimos casos falsos de blasfemia contra cristianos inocentes - afirma - sólo para ajustar cuentas personales e intereses creados. Mi misión es alzar mi voz y ofrecer ayuda a las víctimas inocentes".
Otro problema urgente y sin resolver es el de las jóvenes - a menudo menores de edad - secuestradas y convertidas a la fuerza a otras religiones, la mayoría de las veces a manos de "la realidad mayoritaria" [musulmana, nde.] en Pakistán. “Debemos pedir a las instituciones estatales - afirma el prelado - que tomen muy en serio estos casos, que pongan a los culpables entre rejas y que hagan justicia a las familias y a las niñas víctimas. Sólo con la ayuda de las instituciones públicas podremos resolver estos problemas, y la Conferencia Episcopal seguirá haciendo oír su voz por los derechos de la comunidad cristiana".
Por último el nuevo presidente ha fijado como prioridad el mundo de los jóvenes y de los matrimonios, para intentar ofrecerles mayores oportunidades. “Necesitamos fortalecerlos para que puedan contribuir a un futuro mejor de la comunidad. La vida de nuestras familias es desesperada y la tasa de divorcios aumenta día a día; para hacer frente a este problema debemos trabajar en la preparación para el matrimonio antes de la boda. Las parejas deben estar sensibilizadas para llevar una vida feliz y bendecida después del matrimonio. Haré todo lo que esté a mi alcance - concluye Mons. Shukardin - para trabajar en nombre de la 'justicia' por la comunidad cristiana y poner en evidencia los problemas de las personas inocentes que son objeto de ataques sólo por su fe".
El padre Bonnie Mendes, ex secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Pakistán y ex responsable de Cáritas Asia, dice que está "feliz" por el nombramiento, porque es originario de Sindh y "trae consigo las preocupaciones de las zonas rurales". El P. Khalid Rashid Asi, director diocesano de la Comisión Justicia y Paz, agradece a Mons. Arshad por el trabajo realizado hasta ahora al frente de la Conferencia Episcopal, en la cual creó varios "departamentos diocesanos". "Mons. Samson - afirma - es una persona muy culta y también conoce las leyes. Creo que bajo su dirección la Conferencia Episcopal florecerá y hará todo lo posible para mejorar la vida de la comunidad cristiana". Él, advierte, tendrá que "desempeñar un papel profético y dar lo mejor de sí mismo". El sacerdote considera que, bajo la dirección del obispo de Hyderabad, la Conferencia Episcopal tiene la tarea de "establecer una relación constructiva con el gobierno y las dependencias públicas, para ayudarnos a resolver nuestros problemas". Por último, como presidente de la Comisión de Justicia y Paz, concluye el p. Khalid, "Espero que dé lo mejor de sí para que prevalezca la justicia, y que guíe, como buen pastor, a toda la comunidad hacia un futuro mejor".
17/12/2016 13:14