Nepal, los jóvenes convertidos al catolicismo "son el verdadero motor de la evangelización"
Katmandú (AsiaNews)- Los jóvenes nepaleses convertidos al catolicismo son 2el verdadero gran motor de la evangelización. Contribuyen en manera activa en la sociedad y viven una vida feliz y plena. Muchísimos de ellos están comprometidos en difundir la Palabra de Dios entre la población: estoy feliz y contento de estos jóvenes". Bhim Rai, catequista de la diócesis de Katmandú, define así la "ola positiva" de interés que el País expresa en este período hacia el cristianismo.
Dipal Thapa, convertido de hace poco, confirma a AsiaNews este relato: "En el pasado, cuando el País era una monarquía hindú, los católicos vivían con el miedo de ser marginados. Pero hoy la nuestra es una nación seglar, y este temor ye no existe más. Para mí, la conversión representó un privilegio, porque ahora puedo trabajar para difundir el Evangelio y contribuir en la construcción del reino de Dios. Porque las familias católicas ahora pueden vivir en paz, fuertes de su propia vocación. Pero hay mies de otras personas, sobre todo jóvenes que sufren por la falta de valores fuertes". El desafío, concluye, "es la de transmitir la gracia de Dios a los pobres, a los oprimidos y a los necesitados".
Reena Tamang frecuenta el colegio y el catecismo: pronto será bautizada. Su conversión representa una llamada cotidiana: "Miles de mujeres y de muchachas, viven sin oportunidad de conocer a Jesús. Yo estoy convencida que Dios haya querido también a mí en su primer plano, y por lo tanto me siento feliz de poder compartir mi experiencia con las compañeras de estudio y con los vecinos. Nepal tiene un gran número de personas que aún creen en la superstición, pero si logramos entender el horizonte de ellas, podremos hacer grandes cosas".
En Nepal viven casi 150 mil cristianos, de los cuales 80 mil son católicos. Antes de la caída de la monarquía (2006) el hinduismo era religión de Estado e influenciaba la vida de cada ciudadano. La proclamación de un Estado laico, garantiza la libertad religiosa, pero las minorías- en particular la cristiana- sufren aún abusos y amenazas por parte de la comunidad de mayoría. La población hindú está a menudo en el centro de episodios de discriminación, violencia contra las mujeres y marginación de los más pobres. No faltan además las acusaciones- por parte de los hinduistas y algunas veces también de los budistas- a católicos y cristianos de convertir a las personas por la fuerza u ofreciendo a ellos dinero.
El p. Richard Rai, sacerdote encargado de la pastoral en la catedral de Katmandú, concluye: "Yo estoy orgulloso de trabajar en Nepal. Tenemos tantas responsabilidades, porque son muchísimas las personas dispuestas a trabajar y a escuchar las enseñanzas de Cristo. Los nepaleses son acogedores y cordiales, interesados en conocer el Evangelio. Por lo tanto más allá de las amenazas sociales, nuestro verdadero desafío es la de alcanzar a estas personas y compartir con ellos la importancia de la gracia divina en las vidas de todos nosotros".
17/12/2016 13:14