Murió el rev. Yohan Devananda, durante 60 años "siervo del diálogo" en Sri Lanka
El reverendo anglicano provenía de una familia rica, pero él eligió servir a la gente de su país. Se construyó un ashram cristiano donde favoreció el diálogo entre los cristianos, budistas y marxistas. En el momento este ashram se ha convertido en centro para jóvenes huelguistas, activistas. Trabajó para mejorar las relaciones entre el norte y el sur; luchado contra el régimen de Rajapaksa; salvado a cientos de personas durante la guerra civil.
Colombo (AsiaNews) - Sevaka Yohan Devananda, un sacerdote anglicano, murió el 5 de marzo a la edad de 88 años. Nacido en una familia rica, durante más de 60 años ha sido "servidor" de la población de Sri Lanka, como solía ser definido. Trabajó mucho para fomentar el diálogo entre las diferentes comunidades religiosas, "despojándose" incluso de la ropa más moderna y vistiéndose con ropa humilde para acercarse aún más a los últimos.
A continuación AsiaNews publica la memoria de Sunanda Deshapriya, reconocido activista y periodista, desde hace muchos años en el exilio en el extranjero y que ahora regresó a la isla.
Sevaka Yohan Devananda fue enterrado en su "nido", la tierra del Devasarana (protección divina) en Ibbagamuwa, en el distrito de Kurunegela. No hay duda de que la tierra que le dio la bienvenida cada mañana con el olor de las flores de sepalika, habrá acogido con gran satisfacción su cuerpo.
La primera vez que oí hablar de la rev. Yohan fue de mi madre en 1971. Él había venido a visitar mi casa con algunos miembros en el frente para la protección de la comunidad, en el periodo en el cual mi hermana y yo estábamos en la cárcel por la revolución de 1971. También la Señora Suriya Wickramasinghe hacia parte del grupo. Desde esa primera vez, vino a visitarnos muchas veces. Gracias a su personalidad, mi madre llamó Yohan a un niño nacido en la segunda generación de nuestra familia. Este hijo se convirtió en el mejor jugador de tenis de mesa en la isla y desde hace años Yohan lo visitó en el Royal College en el día de su cumpleaños, bendiciéndolo y llevándole un regalo de chocolate.
Se presentó como "Sevaka" ( "servidor") y una de sus mayores ejemplos fue su determinación de continuar su misión a pesar de los obstáculos y fracasos. Por lo que sé, nunca se arrepintió de haber elegido el trabajo social como recorrido para su vida.
Él nació en una familia rica de la élite. Después de recibir una buena educación en Inglaterra, Yohan regresó a Sri Lanka, abandonó su propiedad y la riqueza y se unió al sacerdocio con el p. Lakshman Wickramasinghe. Tras Lakshman Wickramasinghe se convirtió en el obispo de la diócesis de Kurunegela, convirtiéndose en un destacado líder religioso con posiciones liberales en temas sociales.
A finales de los 50 en la intersección de Yakkala, a Ibbagamura, gracias al liderazgo de Yohan fue construido un ashram cristiano de acuerdo a las tradiciones locales. De acuerdo con el cura, Devasaranaya fue construido a través del diálogo entre cristianos, budistas y marxistas.
En lugar de los pantalones y la camisa, llevaba un pareo blanco y una camisa blanca corta. Yo sé que él utilizó una bolsa de tela sencilla hasta sus últimos días. Durante su vida, él confió en el potencial revolucionario de las poblaciones rurales. Pero trató de ser una persona común entre ellos.
De acuerdo a su estilo, a veces era un líder, otras veces era un miembro común en la lucha por la justicia social. Amaba la frase "crecer a la sombra del otro".
Se dice que se debe alabar las cosas buenas acerca de una persona después de su muerte, y dejar a Dios investigar los errores y debilidades. También hay algunas cosas críticas de Yohan en cuanto un ser humano. No debemos estar sorprendidos por las críticas, especialmente teniendo en cuenta su amplia participación en las primeras etapas de las ONG.
Pero ninguno de estos críticos puede negar los servicios prestados por Yohan para el movimiento popular y las iniciativas progresistas en Sri Lanka. Deja una huella inolvidable en las recientes luchas democráticas en nuestro país.
Dada su sensibilidad por las cuestiones sociales, fue influenciado por la lucha para derrocar a las castas superiores (¿o podríamos decir brahmanes, o cliques de los brahmanes?) en 1956 y en las vibraciones por la revolución de 1971.
Devasaranaya se unió a los experimentos de granjas colectivas en los distritos de Puttalam y Kurunegela gracias a los jóvenes que fueron liberados después de la detención por su participación en la revolución de 1971. Aunque el experimento fracasó, ayudó a desarrollar una red de jóvenes que habían participado en la revolución en 1971. Devasaranaya fue el eje central de esta red. Estas personas, que estaban tratando de aprender de la derrota de 1971 y que se organizan como agricultores, se convirtieron en el puente entre la All Ceylon Farmers Federation, Devasaranaya y Yohan.
Seguidamente Yohan jugó un papel decisivo en la transformación de la débil Federación en una fuerza poderosa en 1980-2000. Durante un tiempo, el periódico "Goviya (agricultores)" fue impreso y distribuido por Yohan y la Devasaranaya.
En ese momento, la Devasaranaya se había convertido en un destacada ONG y las principales agencias internacionales que lo apoyaban eran aquellas con objetivos progresistas.
Yohan también era activo en la provisión de redes de solidaridad que se construyeron después de la derrota de la huelga organizada en 1981. Él dio vida a todos los movimientos de la isla para obtener puestos de trabajo para los huelguistas, junto al Ven. Anomadassi del templo de Batapola. El Ven. Anomadassi, un monje budista con un pasado como socialista y una dirección revolucionaria, era un asiduo regular de Devasaranaya.
Yohan y Devasaranaya también ayudaron a lanzar el Progressive Women's Front, que más tarde se convirtió en la Women's Development Foundation. Para Yohan, la igualdad entre hombres y mujeres es una cuestión clave.
Yohan también pasó mucho tiempo en la construcción de puentes de entendimiento entre el Norte y el Sur. Poco antes de los pogromos contra los tamiles en 1983, imprimió y distribuyó - a través de la iniciativa colectiva - un folleto titulado "La guerra o la paz". Era un recurso valioso para la armonía social, la cual recomendamos leer incluso en la actualidad.
Yohan intervino de una manera activa en la creación de un diálogo srilakese entre la teología de la liberación y el marxismo.
Durante el período de represión entre 1988-1990, la protección ofrecida por Devasaranaya salvó las vidas de cientos de activistas que eran los objetivos de las listas del Deshapremi Janatha Viyaparaya (Djv)/Janatha Vimukthi Peramuna (Jvp). El fallecido Sarath Fernardo se hizo cargo de la iniciativa juntos y Yohan.
Yohan también se unió a las protestas organizadas en el período 2007-2009 contra el régimen de Rajapaksa, a pesar de estar enfermo. Vi una fotografía de Yohan mientras marchaba a la vanguardia durante una protesta contra el secuestro y asalto brutal del periodista Poddala Jayantha en junio de 2009.
Nunca ha evitado incurrir en una pelea por razones personales o ideológicas. También tenía la costumbre de visitar las casas para examinar el bienestar de las personas. He aquí por qué no debemos permitir que el ejemplo de personas como Yohan termine con su muerte, en un momento en el cual la solidaridad se expresa con más frecuencia a través de un SMS en el teléfono móvil y el servicio social se ha convertido en una profesión.
Esta nota es un homenaje a ese ejemplo.
(Con la colaboración de Melani Manel Perera, traducción de AsiaNews)
