Mosul, líderes cristianos: más allá del ISIS, el objetivo es reconstruir en ‘paz y fraternidad’

Tensiones y amenazas yihadistas a lo largo de la frontera entre Irak y Siria. Aunque se siguen con atención estos hechos, el objetivo es reconstruir. Monseñor Moussa: la vida "retoma su curso" y la visita del Papa en marzo del año pasado sigue marcando el camino hacia la fraternidad. Obispo del Kurdistán: el principal problema es "el vacío político".

Mosul (AsiaNews) - Desde el asesinato de Abu Ibrahim al-Hashimi al-Qurayshi, sucesor de al-Baghdadi al frente del Estado Islámico (EI, ex ISIS), hasta los bombardeos turcos contra los milicianos kurdos del PKK, pasando por el asalto a la prisión de Ghwayran, se viven días de tensión en la frontera entre Irak y Siria. Una escalada que tiene como protagonistas a los milicianos del califato, que en otro tiempo solían controlar la mitad de los territorios entre ambos países, especialmente las zonas desérticas, y que hoy mantienen una presencia activa con células durmientes, pero dispuestas a atacar. Esta violencia preocupa especialmente a la parte siria, mientras que en Irak la inestabilidad se ve alimentada sobre todo por la crisis política. En el frente del terrorismo y la seguridad, sin embargo, la situación parece estar mayormente bajo control.

Monseñor Michaeel Najeeb Moussa es dominico, y desde enero de 2019 está al frente del arzobispado caldeo de Mosul, la metrópoli del norte que fue un bastión yihadista. El prelado asegura que en la ciudad "no se respira un clima de miedo" por lo que está ocurriendo "especialmente al otro lado de la frontera, en Siria". Incluso en la llanura de Nínive, añade, "la situación es relativamente tranquila y estable". En diálogo con AsiaNews, comenta que “Mosul es una de las zonas más pacíficas de Irak en la actualidad, yo mismo he estado viviendo allí durante seis meses. A nivel popular, continúa, "la vida está retomando su curso normal, a su ritmo, con una armonía de fondo" que se trata de construir partiendo de los principios de la "paz, fraternidad y respeto mutuo".

Un impulso al diálogo y a la reconstrucción que promovió "el Papa Francisco en marzo del año pasado", durante su histórico viaje apostólico a Irak. "Se presta gran atención a esta ciudad martirizada, para ayudarla a liberarse de las secuelas del pasado y apoyar la reconstrucción de las infraestructuras, para progresar juntos", concluye el arzobispo caldeo.

En algunas zonas del norte de Irak, viajar de noche puede ser peligroso, porque se temen ataques del ISIS, cuenta un ciudadano de Jalawla, una localidad del noreste. La mayoría de la gente concuerda en que Daesh [acrónimo árabe de ISIS] no es tan poderoso como en 2014 y sus recursos son limitados Sin embargo, el riesgo es que aproveche una situación de confusión, un vacío de poder y el control de algunos territorios, especialmente al otro lado de la frontera. Como señalan algunos habitantes de Sinjar, el ISIS llegó primero de Siria y es precisamente al otro lado de la frontera donde la realidad parece menos estable y las células de los milicianos tienen mayor libertad para desplazarse, actuar y atacar.

Al mismo tiempo, todavía hay mucho trabajo por hacer para contrarrestar la mentalidad sectaria, en la que surgen episodios de abuso y marginación. Según el sitio web ankawa.com, la policía de Mosul inició una investigación sobre la muerte de una joven que había sido expulsada previamente por la directora de una escuela secundaria por negarse a llevar el velo islámico. Probablemente murió por causas naturales, eso debe investigarse. Monseñor Paul Thabit Mekko, obispo coadjutor de Alqosh (Kurdistán iraquí) y en el pasado responsable de la comunidad cristiana de Karamles, en la llanura de Nínive, confirma que surgieron rumores al respecto, pero los detalles todavía no se han esclarecido, “no tenemos ninguna certeza al respecto”.

En cuanto a los atentados del Daesh, Mons. Mekko dice que "pueden ocurrir episodios", como el del mes pasado, cuando "asaltaron una unidad del ejército". La fuga de milicianos de una prisión siria también despierta temores en Irak, luego hay casos esporádicos de violencia, como ocurrió en Kirkuk”, pero en general, la vida se desarrolla con normalidad”. El "principal" problema, advierte, es "el vacío político, la incapacidad de elegir un presidente y la división en el seno de los grupos chiíes, que no quieren cooperar. Por otro lado, algunos representantes que solían ser poderosos están volviendo a la escena política para pedir un cargo en el gobierno". En este contexto, concluye, "los cristianos nos apoyamos en la oración y el ayuno”, como estamos haciendo en estos días por la súplica de Nínive, un acontecimiento muy importante para todos los cristianos iraquíes".