Moscú, Putin intenta relanzar ‘Rusia Unida’
Tras dejar atrás la imagen de líder independiente, el presidente vuelve a hacer campaña con su partido, que pierde consenso de cara a las elecciones de septiembre. Crece su apoyo al ministro de Defensa Šojgu, expresión del rostro "euroasiático" de Rusia.
Moscú (AsiaNews) - El 22 de agosto, "día de la bandera nacional", el presidente ruso Vladimir Putin se reunió con los dirigentes y "nuevas caras" de las listas electorales de su partido, "Rusia Unida". Los edinorossy (miembros del partido, en ruso) discutieron con el presidente las nuevas iniciativas sociales a incluir en el programa que se presentará el 24 de agosto en el congreso, donde él mismo estará presente. En las últimas elecciones presidenciales, Putin se presentó como candidato independiente por encima de los partidos. En esta campaña su apoyo tendrá que impulsar su partido, ya que el consenso se ha derrumbado por debajo del 30% según las últimas encuestas.
El "programa popular" cuenta con la participación de los más destacados colaboradores de Putin: el ministro de Defensa, Sergei Šojgu, y el ministro de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov. Además, con el director del principal hospital, Denis Protsenko, la directora del centro de formación Sirius, Elena Šmeleva, y la delegada para los derechos de los niños, Anna Kuznetsova. Los nuevos políticos de la plataforma de lanzamiento, según el diario Kommersant, son la coordinadora del proyecto "Es hora de dar a luz" Tatjana Butskaja, el presidente del consejo de asociaciones de voluntarios Artem Metelev, la miembro del Frente Popular Panruso (la coalición pro-Putin) Olga Amelčenkova y el jefe del ala juvenil del Frente, Igor Kastjukevič.
El congreso de los edinorossy consta de tres etapas: el 19 de junio se elaboraron las listas de candidatos preliminares, la segunda etapa, que será el 24 de agosto, es para la presentación del programa y la tercera será después de las elecciones de septiembre. Se espera que no haya contratiempos para conseguir la mayoría, ya que todos los candidatos independientes y de la oposición han sido eliminados, detenidos o excluidos de la carrera electoral.
Las intervenciones de Putin deben demostrar la unidad con los representantes y activistas, para dar sentido al propio nombre del partido e impulsar su popularidad. En la primera reunión de junio, el propio presidente anunció los cinco primeros nombres de la lista, encabezados por Šojgu y Lavrov, explicando que había participado personalmente en su selección. Como propuestas sociales, Putin esbozó los subsidios que se repartirán a los ciudadanos, la modernización de los sistemas de salud y educación, las desgravaciones fiscales y las ayudas a las familias, medidas que espera satisfagan a una población cada vez más afectada por la crisis sanitaria y económica. Algunos, sin embargo, han observado que atribuir cada propuesta al presidente puede ser un error, ya que vacía de significado a los otros candidatos.
A pesar de los grandes esfuerzos propagandísticos, los sondeos de julio no muestran un crecimiento significativo para los edinorossy, y el último mes de la campaña será decisivo. Detrás del partido en el poder se sitúan los comunistas del KPRF, con un 16%, un 2% más que el mes anterior. La actual administración presidencial espera un 50% de participación en las próximas elecciones, y un 45% de consenso para "Rusia Unida".
En realidad, la figura del presidente parece hoy bastante desgastada, y en ello puede que pesen las reiteradas demostraciones de fuerza y la represión de la disidencia dentro y fuera del país. El 19 de agosto se cumplió un año del envenenamiento de Aleksei Navalny, quien, desde la cárcel de Vladimir, difundió un llamamiento en los medios de comunicación occidentales contra la corrupción universal (y presuntamente, el presidente ruso es el principal exponente de ella). Putin podrá explotar su sensación de superioridad sobre los estadounidenses tras la ruina de Afganistán: en su conversación con Biden dejó claro que Rusia no quiere a Estados Unidos en Asia Central, pero este argumento ya casi no anima el corazón de los rusos.
Estas elecciones tendrán, por tanto, el cometido de exaltar a una o varias personalidades que puedan apoyar o incluso suceder a Putin, pero para ello parece necesario estar preparado con una especie de "tensión escatológica". Entre los distintos jerarcas, la estrella que más brilla parece ser la de Sergei Šojgu. El ministro de Defensa es oriundo de Tuva, una república autónoma en la frontera con Mongolia, y presenta la cara "euroasiática" de la Rusia bicontinental. Hace pocos días, fue él quien propuso construir nuevas ciudades en Siberia, e incluso trasladar allí la capital de la Federación Rusa; mientras tanto, el político acompaña a Putin en giras "extremas" por sus territorios natales. En otra ocasión, recordó con nostalgia los tiempos de cooperación con los líderes serbios Slobodan Milosevic y Radovan Karadzič (condenados por crímenes de lesa humanidad), para exaltar el orgullo eslavo de una forma provocativa. Hoy se muestra como el mejor amigo del presidente y de toda “Rusia Unida”.
21/09/2021 10:05
08/09/2021 10:33
19/01/2021 10:43