Monje budista recorre 1500 kilómetros para redescubrir la peregrinación
El ex combatiente en la Guerra de Vietnam Luang Ta Bun Chen interrumpe todos los años retiros y estudios para realizar sus recorridos a pie, que también constituyen una oportunidad para compartir su experiencia con las personas que encuentra. Este año caminó desde Phuket hasta Nakhom Phanom, un pueblo donde el "dhammayatra" se encuentra en riesgo de quedar reducido a una atracción turística.
Bangkok (AsiaNews) - Tailandia, por debajo de su modernidad y sus contradicciones, con estilos de vida a menudo alejados de sus orígenes, sigue conservando sin embargo prácticas tradicionales de origen religioso. Una de ellas es la peregrinación.
Una confirmación de ello es la larga caminata anual, que en este momento está cerca de la meta, de Luang Ta Bun Chen, un monje budista muy conocido en Tailandia por su constante práctica de la peregrinación. La última ha sido un recorrido de 1.500 kilómetros que lo llevó desde la isla sureña de Phuket hasta su provincia natal de Nakhon Phanom, en la frontera noreste con Laos.
Aunque los catálogos turísticos destinados a viajeros locales o extranjeros proponen viajes a lugares de la tradición religiosa budista del país, experiencias espirituales en monasterios o recorridos tras las huellas de famosos maestros espirituales, la tradición de la peregrinación (dhammayatra) está debilitándose cada vez más en el "País de la sonrisa" debido a los nuevos estilos de vida y las dificultades que conlleva, en un entorno generalmente menos favorable que en el pasado. Sin embargo, todavía inspira un gran respeto y, junto con el retiro espiritual y las obras de bien en favor de monasterios y templos, sigue siendo uno de los pilares de la práctica de la mayoría budista de los tailandeses que adhieren a los principios del budismo Theravada.
La historia personal del monje Luang Ta Bun Chuen añaden interés al encuentro con muchos devotos que se acercan a él en el camino para recibir una bendición. Combatiente en la guerra de Vietnam en 1969, está casado y es padre de cuatro hijos. En 2009 decidió abandonar las cosas mundanas para retirarse a un monasterio y dedicarse al estudio de la doctrina budista. Retiro y estudios que interrumpe anualmente para realizar sus peregrinaciones, que lo han hecho popular como ejemplo de renuncia a los bienes materiales, de búsqueda espiritual y de compartir experiencias con quienes a cambio le ofrecen lo necesario para continuar el camino. En primer lugar, el agua potable que, si le sobra, dona a escuelas y hospitales que encuentra en el camino. Eso le permite cumplir mejor sus votos y su opción espiritual, pero también garantiza a quienes lo encuentran y quieren ganar méritos, que están contribuyendo a la liberación común, según los conceptos budistas que se practican en Tailandia y en otros países de tradición Theravada, en la cual la acumulación de méritos es fundamental para alcanzar el fin último.
03/11/2020 15:24
08/07/2019 13:47