Manila: 4 millones más de filipinos viven en la pobreza

Según un informe estadístico del primer semestre de 2021, el 18% de las familias hoy son pobres. Se considera que la causa principal es la serie de confinamientos sumamente estrictos. Padre Caelli, de Parañaque: "Todos los días llegan pedidos de ayuda a nuestra parroquia".

Manila (AsiaNews) - Al menos 26,1 millones de filipinos viven en situación de pobreza. Son casi 4 millones más que el último relevamiento de 2018. Las cifras corresponden al informe que publicó el organismo oficial de estadísticas del país, que evaluó el impacto de la pandemia de covid-19 en la población. En el primer semestre del año, la tasa de pobreza se elevó al 23,7%, superando la de tres años antes que la situaba en el 21,1%, equivalente a 22,26 millones de personas.

Las familias pobres son el 18% de la población, es decir 4,74 millones, 700.000 más que en 2018. Este año la línea de pobreza para una familia de cinco personas se fijó en 12.082 pesos filipinos (213 euros) al mes. Un hogar que gana menos de esta cantidad no puede satisfacer sus necesidades alimentarias y otras necesidades básicas; hace tres años, 10.532 (185 euros) eran suficientes.

Confirma los datos el P. Simone Caelli, misionero del PIME en Parañaque, una de las 16 ciudades que conforman el área metropolitana de la capital, Manila. "El covid ha aumentado las contradicciones", dijo a AsiaNews. "Hace unos días Parañaque fue reconocido como el quinto municipio más rico en base a los impuestos que pagan los contribuyentes", explica el sacerdote. "Pero sigue habiendo muchísima gente pobre".

La parroquia de Parañaque está ubicada cerca del aeropuerto internacional, donde se siguen construyendo altos edificios y grandes centros comerciales. No muy lejos, sin embargo, se encuentra un enorme barrio marginal. “Tuvimos que hacer frente a 4 confinamientos muy estrictos", explica el p. Caelli. “En nuestra parroquia hay bolsones de pobreza crónica, porque las personas que no llegaban a fin de mes ya eran muchas antes de la pandemia, pero el covid ha acentuado esta situación”.

“Debido a las restricciones, muchas personas perdieron su trabajo, sobre todo albañiles y conductores de bicitaxis”, los rickshaws locales de tres ruedas, aclara. “Durante mucho tiempo no pudieron trabajar y ahora pueden transportar como máximo a una persona, y eso es muy poco. Lo sabemos porque todos los días llegan a nuestra parroquia pedidos de ayuda de familias en las que uno de los padres ha perdido su trabajo”.