Mangalore, 30 mil fieles en el encuentro de la Iglesia por la "lealtad a la Constitución y a la fe".

de Nirmala Carvalho

La iniciativa es de los tres ritos de la Conferencia Episcopal de la India: el latino, el siro-malabar y el siro-malankarés. Solicitó la institución de la fiesta pública el 8 de septiembre, día en que se celebra la Natividad de María. Obispo de Puttur: "Nuestros sentimientos están siempre con nuestro país y nuestra fe está siempre con el único Dios que nos une y nos enseña a amar".

Mangalore (AsiaNews) - Al menos 30 mil fieles participaron en el encuentro organizado por la Iglesia Católica India en Mangalore, Karnataka, para reafirmar su "fidelidad a la India, a la Constitución de la fe cristiana". La asamblea se celebró ayer en las calles de Madanthyar (a unos 50 km al este de Mangalore). La iniciativa es de los tres ritos de la Conferencia Episcopal India -latina, siro-malabar y siro-malankarés- que al final del evento pidió al gobierno que declarara día festivo el 8 de septiembre, día en que se celebra la Natividad de María.

El encuentro se llamó “Catholic Maha Samavesha-2020”. Los participantes comenzaron con una larga "procesión de la unidad" que partió del centro de la ciudad y llegó frente a la Catedral del Sagrado Corazón. Cientos de sacerdotes, monjas y miles de representantes de las comunidades católicas estaban presentes. Entre los altos exponentes eclesiásticos se encontraban: Mons. Peter Paul Saldanha, obispo de Mangalore; Mons. Geevarghese Mar Divannasios, de la diócesis siro-malanquesa de Puttur; Mons. Lawrence Mukkuzhy, de la diócesis siro-malabar de Beltangady.

La asamblea cae en un período histórico marcado por la turbulencia política y religiosa, después de la aprobación de la nueva ley de ciudadanía por parte del Parlamento indio. La ley ha provocado un acalorado debate porque excluye a la minoría islámica de la solicitud de naturalización. Varios católicos también se han puesto en contra de una "flagrante discriminación que corre el riesgo de desgarrar el país" y al mismo tiempo reafirman su adhesión a los valores de la naturaleza laica del Estado.

En el discurso inaugural, Monseñor Saldanha destacó: "Somos indios. En Mangalore tenemos 450 años de historia de vida pacífica y respetuosa, y nunca hemos ofendido a otros como fieles de Jesucristo. Creemos en la virtud de los seres humanos y siempre damos prioridad al hombre en nuestra vida privada y familiar. Al mismo tiempo, añadió, "creemos en nuestra Constitución. Vivimos para nuestro país". Luego recordó el papel del jesuita P. Jerome D'Souza, "que trabajó con B R Ambedkar [entre los padres de la nación, de origen dalit, ndr] y ha contribuido a preparar la Constitución”.

Monseñor Mar Divannasios explicó: "Nos hemos reunido aquí para mostrar nuestra unidad y presentar nuestras demandas al gobierno y a las autoridades. Somos aptos para todas las funciones previstas por nuestra Constitución. Somos conocidos por el servicio social y la armonía. Con este Samavesha, anunciamos que no caeremos fácilmente. Nuestros sentimientos están siempre con nuestro país y nuestra fe está siempre con el único Dios que nos une y nos enseña a amar. Estamos unidos con la India, que tiene una Constitución que hace énfasis en la unidad en la diversidad”.

Para Monseñor Mukkuzhy, la reunión se organizó con el objetivo de "unir, reflexionar y fortalecer". Estamos unidos a Jesús y a la fe católica. Reflejamos las enseñanzas de Jesús. Nos enseña la humanidad. Sin ella, la religión no tendría sentido. La humanidad es nuestra fe, centrada en Cristo". Continuó: "Somos cien por ciento ciudadanos indios. Estamos a la vanguardia cuando se trata de hacer nuestra contribución en la educación y la salud. Nadie puede negar esto con acusaciones tontas y razones estúpidas. Hay ministros, deportistas, educadores, científicos e intelectuales que han estudiado en escuelas dirigidas por cristianos. Nunca hemos tratado de convertirlos a ellos o a alguien más al cristianismo, ni han dejado su religión. Respetamos todas las religiones y aceptamos todas las creencias. Como ciudadanos de la India y amantes irreductibles de este país, continuaremos nuestro servicio social. Nadie puede impedirnos hacerlo".