Madhya Pradesh: la Iglesia sirve al desarrollo de la sociedad, pero las escuelas católicas son atacadas
En Vidisha, el St. Mary’s Post Graduate College está amenazado por los fundamentalistas. El p. Biju ilustra la obra social de la diócesis de Sagar. La asociación Manav Vikas Seva Sangh fundada hace 27 años y sirve a 286 pueblos de tribales.
Mumbai (AsiaNews)- “Es realmente triste que mientras la Iglesia se compromete en el desarrollo de la sociedad, los institutos católicos son tomados de mira para mancillar nuestra imagen”. Lo afirma a AsiaNews, el p. Thomas Philip, conocido como el p. Biju, director del Manav Vikas Seva Sangh, la Sociedad para el desarrollo humano de la diócesis de Sagar (Madhya Pradesh). Él interviene en la cuestión del St. Mary’s Post Graduate College di Vidisha, cuya jurisdicción le compete a su diócesis. De hace días la escuela está en el centro de una campaña intimidatoria por parte de los fundamentalistas hindúes, que pretenden celebrar rituales votivos hindúes en su interior y amenazan con graves consecuencias. “De todos modos-afirma el sacerdote-no estamos desalentados. La Iglesia católica continuará seguramente trabajando para el desarrollo de los emarginados y de los oprimidos”.
Refiere el director, que la diócesis “sirve a través del apostolado en las escuelas y por el desarrollo, sin hacer discriminaciones. Por otro lado los hindúes son los mayores beneficiados por nuestros servicios. También en el College de Vidisha la mayor parte de los estudiantes son hindúes”.
El sacerdote ilustra lo obrado por Manav Vikas Seva Sangh, fundado hace 27 años. Este es el brazo oficial de la diócesis, que se ocupa en particular de mejorar las condiciones de la sociedad. “La organización-explica el p. Biju-se ocupa del bienstar de la comunidad sin distinción de casta, credo, religión o raza. Quiere fundar una sociedad fundada sobre las enseñanzas del Evangelio como paz, justicia, igualdad, amor, cooperación y fraternidad. Ya desde su nacimiento, luchó sin parar y en modo vigoroso para dar voz, poder a los impotentes y recursos a los pobres”.
La asociación “está presente en 286 pueblos y desarrolla varios proyectos, como: bienes de subsistencia, apoyo a las mujeres, salud e higiene, educación informal, buenos gobernantes, agricultura sustentable, derechos de los niños, gestión de los recursos naturales”.
El territorio montuoso, explica, “está habitado en su mayoría por una población tribal pobre y analfabeta, privada del más simple confort como la casa, la ropa, la comida. Estos grupos, my explotados, viven en la floresta y su sobrevivencia depende del conseguir la comida, de agricultura espontánea y los salarios diarios. Los cambios climáticos y el rápido agotamiento del trabajo manual debido a la mecanización (del sistema productivo) han gravemente afligido a la vida económica de las poblaciones tribales. Nuestro acercamiento consiste en el reforzar la comunidad, valorizando la calidad de las familias, las necesidades esenciales del grupo y asegurando inclusiones y participación al propio desarrollo. Nuestra estrategia de trabajo refuerza a los tribales y “les permite) acceder y beneficiarse del sistema de instrucción y del trabajo, de los servicios sociales y sanitarios”.
En substancia, concluye, “trabajamos para erradicar la pobreza y el hambre entre los tribales y mejorar su condición de vida; hacer que sea universal el acceso a la instrucción primaria; promover la igualdad de género y reforzar a las mujeres y muchachas; reducir la mortalidad infantil; mejorar el acceso a las prestaciones médicas; asegurar la sustentabilidad ambiental garantizando agua limpia, servicios higiénicos y juntar la basura; tomar medidas correctivas contra el sistema de las castas y otras prácticas sociales discriminatorias; alentar las capacidades de los tribales, para un desarrollo individual”.