Los trucos y la violencia de Beijing para detener a los jóvenes chinos rumbo a la JMJ
El gobierno bloqueó ayer a un grupo de 50 jóvenes peregrinos cuando ya estaban embarcados en un vuelo directo a Cracovia. Interrogados durante horas en migraciones, fueron “reprendidos” y enviados de vuelta a casa con la orden de no contactar a nadie en el exterior. En tanto, en los lugares centrales de la Jornada Mundial de la Juventud deambulan “jóvenes católicos chinos”, que tienen la tarea de espiar a sus compatriotas. Trabajan para institutos culturales o empresas chinas en Polonia.
Cracovia (AsiaNews) – El gobierno chino detuvo ayer a un grupo formado por 50 jóvenes peregrinos, que se habían embarcado en un vuelo directo rumbo a Cracovia, y los obligó a descender y regresar a casa. Los funcionarios políticos del aeropuerto de Beijing bloquearon el avión, que ya estaba ubicado en la pista de despegue, y se llevaron a los chicos: fueron interrogados durante horas en migraciones, fueron “reprendidos” y enviados a casa con la orden de no contactar a nadie en el exterior. Es lo que dice un joven católico –ya en Polonia- a AsiaNews, a quien su párroco había asignado la tarea de guiar a la delegación.
El grupo bloqueado estaba compuesto por jóvenes de Beijing y de las diócesis circundantes. No habiendo hallado sponsors europeos que les otorgaran una garantía, se dirigieron simplemente a la oficina consular polaca en la capital china para solicitar la visa. Una vez obtenido el documento, compraron los pasajes y se embarcaron. El gobierno los acusa de haber “violado las normas para los viajes al exterior”, les retiró sus pasaportes y amenazó al párroco advirtiéndole acerca de las “graves consecuencias” que tendría el hecho de “violar la ley” otra vez.
La fuente de AsiaNews, que se mantiene tras el anonimato por motivos de seguridad, cuenta que, a pesar de todo, la presencia china –del continente, de Hong Kong, Macao y Taiwán – es de todos modos “considerable. Hablamos de varios miles de personas provenientes del mundo chino, que quizás suman 8.000 en total. Estamos contentísimos de estar aquí y d poder ver al Papa y rezar con él”. Sin embargo, se cierne una gran sombra sobre su peregrinación en esta XXXI Jornada Mundial de la Juventud: “Todos aquellos con los que hemos hablado ahora están muy tristes, y tienen miedo de lo que vaya a pasar una vez que regresen a casa. No es bello vivir así”.
Beijing tiene la intención de controlar de cerca a los connacionales que han logrado salirse de la red puesta en torno a la JMJ, y para hacerlo han desempolvado un truco de la antigua época maoísta: ha pedido a los empleados de las empresas chinas establecidas en Polonia y a los funcionarios de diversos institutos culturales chinos presentes en el territorio polaco que vayan a dar una vuelta por los lugares de la Jornada llevando la bandera china, acercándose a los grupos católicos de coterráneos, tratando de obtener la mayor información posible.
Esta mañana, en la gran plaza Mariacki, dominada por la catedral dedicada a la Virgen, uno de estos grupitos hacía flamear la bandera roja con gran énfasis. Al acercárseles, declararon ser de la provincia de Hebei -“bastión” del catolicismo chino- y explicaron que había sido “facilísimo” llegar aquí junto a los jóvenes de todo el mundo. Sin embargo, al preguntárseles sobre las diócesis de proveniencia, no han sabido qué responder; ante la pregunta de quién era su obispo –pregunta que fue formulada incluso en chino- preguntaron qué era un obispo. A la última pregunta, de quién era el sacerdote que los acompañaba, han respondido “no tener necesidad” de uno.
02/05/2017 13:54
02/08/2016 13:25