Los más pobres son las víctimas de la nueva subida de impuestos
El gobierno de Colombo se adelanta a los acontecimientos y antes de aprobar la ley presupuestaria anuncia el cambio del IVA del 15 al 18% a partir del año que viene. Además, se suprimirán algunas exenciones a bienes y servicios de primera necesidad, lo que afectará sobre todo a las personas y familias en situación de pobreza, tras las subidas de las tarifas eléctricas
Colombo (AsiaNews) - La decisión del gobierno de aumentar el impuesto sobre el valor añadido (IVA) del 15% al 18% a partir de enero de 2024 tendrá - según los analistas - un mayor impacto en los pobres y en general en los sectores más débiles de la población de Sri Lanka. Sería un nuevo golpe asestado tras la subida de las tarifas eléctricas. Ni siquiera la clase media baja estará exenta de repercusiones.
Según el ministro portavoz del gabinete, Bandula Gunawardana, aunque los ingresos fiscales aumentaron más del 50% en los nueve primeros meses de 2023 en comparación con 2022, aún no han alcanzado los objetivos fijados por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Como consecuencia, Sri Lanka no pudo obtener el segundo tramo de ayuda internacional porque el país no pudo cumplir sus objetivos. Para alcanzarlos, a Colombo se le ocurrió la idea de aumentar el IVA y ampliar su aplicación a bienes anteriormente exentos.
Dhananath Fernando, economista y director gerente del Instituto Advocata (think tank político independiente de Colombo), reveló a AsiaNews que "el aumento del IVA elevará indiscriminadamente los precios de los bienes y servicios, provocando una contracción de la demanda, ya que algunas personas ya no podrán permitirse comprar productos de primera necesidad, como arroz y dhal (lentejas rojas). El aumento del 3% del precio de los alimentos no tiene un impacto equitativo en los distintos grupos de renta. Por ejemplo, afectaría tanto a los grupos de renta baja, que gastan una mayor parte de sus ingresos en alimentos, como a los grupos de renta alta, que gastan una menor parte de sus ingresos en alimentos. Por lo tanto, los grupos de renta baja tendrán menos para gastar en otras necesidades, incluidos los medicamentos esenciales y los gastos de educación de sus hijos. Debido a estas distorsiones, aumenta el margen para la corrupción y la posibilidad de que los comerciantes intenten evadir, lo que podría afectar aún más a los ingresos fiscales".
Dhananath Fernando está convencido de que estas políticas fiscales no respetan los cuatro principios básicos de la fiscalidad: simplicidad, transparencia, neutralidad y estabilidad. "El principio de simplicidad en nuestro sistema", explica, "está desvirtuado debido a las distorsiones en los impuestos, las líneas de tipos y las diversas tasas, cuya complejidad dificulta a los particulares la navegación y la comprensión de sus obligaciones fiscales. La transparencia también se ve comprometida cuando los contribuyentes no pueden identificar y comprender sus obligaciones debido a la intrincada estructura arancelaria en la frontera. La neutralidad es otro principio clave, pero hemos visto casos como el impuesto de residencia y el impuesto sobre las superganancias en 2015, dirigidos a grupos específicos."
El anuncio de la subida de impuestos podría haber llegado cuando se aprobara la ley de presupuestos (prevista para el 13 de noviembre), en lugar de ello el Gobierno adelantó el calendario.
17/12/2016 13:14
