Los generales birmanos viajan a Beijing y consiguen más armas para la guerra
En las últimas semanas se reanudaron los enfrentamientos en el Estado de Shan y en Rakhine. El número dos de la junta militar, Soe Win, y el ex presidente Thein Sein viajaron a Beijing y Qingdao para hablar sobre la estabilidad en la frontera, el comercio y las inversiones. Pero según algunas fuentes, también se han firmado nuevos contratos para la compra de material bélico.
Rangún (AsiaNews)- El recrudecimiento de los combates en el Estado de Shan y el avance de las milicias étnicas en Rakhine ha empujado a varios representantes de la junta militar birmana a viajar a China en las últimas semanas. Y según algunas fuentes Beijing podría haber concedido nuevas armas al ejército birmano responsable del golpe de Estado que sumió a Myanmar en la guerra civil en febrero de 2021.
El número dos de la Junta Militar, el general Soe Win, aterrizó el sábado en Qingdao, en la provincia de Shandong, donde participó en un Foro sobre desarrollo sostenible promovido por la Organización de Cooperación de Shanghai, según afirmaron los medios controlados por la Junta.
Soe Win es el representante político de más alto rango que ha recibido Beijing desde el golpe; el jefe del ejército, general Min Aung Hlaing, autoproclamado cabeza de un organismo de gobierno denominado Consejo Administrativo del Estado, todavía no ha visitado China.
Pero a fines de junio el ex presidente Thein Sein (que había favorecido un período de apertura democrática antes de la elección de Aung San Suu Kyi) también viajó a Beijing para reunirse con el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi. Y el 19 de junio el enviado especial de China a Myanmar, Deng Xijun, se reunió también con el ministro de Relaciones Exteriores de la Junta, Than Swe, en Naypyidaw, pocos días antes de la reanudación de los enfrentamientos en el Estado de Shan que se aplacaron en enero gracias a un alto el fuego con la mediación de China.
Este esfuerzo diplomático, como era de esperar, coincidió con la reanudación de las ofensivas de parte de las milicias étnicas que luchan contra el régimen. En los últimos días el Ejército de Liberación Nacional de Ta'ang (TNLA) y el Ejército de la Alianza Nacional Democrática de Myanmar (MNDAA) - los dos miembros que junto al Ejército de Arakan (AA) forman lo que se denomina Three Brotherhood Alliance - se dirigieron hacia Lashio, una de las principales ciudades de Shan, donde también tiene su sede el Comando de las regiones nororientales del Ejército. Miles de civiles huyeron intentando llegar a la ciudad de Taunggyi.
Mientras tanto, el TNLA ha tomado el control del viaducto de Gokteik, un puente ferroviario de la época colonial, bloqueando así todas las rutas de refuerzo y suministro al Comando militar.
Los combates también se extendieron a la cercana región de Mandalay y el Ejército de Arakan ha lanzado una nueva ofensiva para conquistar las dos últimas ciudades que todavía se encuentran bajo control militar, Thandwe y Maungdaw, en el Estado de Rakhine, en la frontera con Bangladés. Por su parte, la fuerza aérea birmana ha intensificado los bombardeos. Según Nyan Lynn Thit Analytica, sólo entre enero y abril de este año se llevaron a cabo 819 ataques aéreos, que mataron a 359 civiles e hirieron a otros 756.
Esta parece ser una nueva fase de la Operación 1027, la ofensiva lanzada por la Three Brotherhood Alliance en octubre del año pasado. Antes de que se firmara el alto el fuego en enero, la Alianza se había apoderado de una gran parte del territorio en la frontera con China, incluidos algunos cruces fronterizos clave para el comercio bilateral.
Beijing, frustrada por la incapacidad de la Junta Militar de erradicar los centros dedicados a las estafas por internet en los que están involucrados miles de ciudadanos chinos, había aceptado pasivamente que el MNDAA tomara el control de una importante zona fronteriza, el Kokang.
Ahora ya no parece ser así: a principios de mes las autoridades chinas cortaron el suministro eléctrico en Laukkai, la capital de Kokang, tal vez para indicar al MNDAA que no aprueban la nueva ofensiva.
Un indicio más evidente, sin embargo, son los nuevos envíos de armamento de Beijing al régimen birmano, de los que el diario online The Irrawaddy afirma: "La lista de compras del régimen es larga y enormes cargamentos de armas están llegando a Myanmar, declararon algunas fuentes, que añadieron: llegarán a Myanmar dentro de dos semanas a un mes”. El envío de armas de China (y más aún de Rusia) a la Junta birmana no es nada nuevo.
Pero es probable que estas expediciones estén relacionadas con visitas recientes de representantes golpistas. Soe Win, como jefe del Ejército, tiene la facultad de firmar las compras de armas. Según los medios del régimen, durante su visita, que finalizó ayer, los temas tratados fueron la estabilidad fronteriza, la seguridad de las inversiones chinas en Myanmar, la erradicación de los centros de estafa online, la promoción del comercio bilateral e incluso las elecciones, un proyecto que la Junta se plantea desde hace meses. Incluso el régimen birmano anunció el lunes que el Año Nuevo chino (más conocido en la región como Año Nuevo Lunar) será feriado oficial en Myanmar a partir del año que viene.
01/09/2021 15:28
04/10/2017 12:23