Los filipinos Junrey y Janine, dos misioneros mártires en 2023

En el informe anual que publica la agencia Fides de las Obras Misionales Pontificias también se incluye a los dos animadores litúrgicos asesinados en la masacre durante la misa en la Universidad de Marawi. En el año que termina mataron a 20 misioneros en todo el mundo.

Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- Junrey Barbante, de 24 años, recién graduado y originario de la isla de Bohol, y Janine Arenas, de 18 años, estudiante proveniente de Balabagan, en la provincia de Lanao del Norte. Dos jóvenes laicos que estaban comprometidos en la animación litúrgica en la capellanía de la Marawi State University de Marawi y por este motivo los mataron junto con otros dos compañeros en el ataque durante la misa del primer domingo de Adviento en Filipinas. Ellos son, junto con Samar Kamal Anton y su madre Nahida Khalil Anton - las dos mujeres cristianas que mataron frente a la Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza el 18 de diciembre -, el rostro de Asia en el informe sobre los misioneros asesinados en todo el mundo en 2023, que - como cada fin de año - ha publicado hoy Fides, la agencia de las Obras Misionales Pontificias.

No simplemente cristianos asesinados, sino misioneros, porque eran operadores pastorales comprometidos en el servicio a su Iglesia local. En efecto, Junrey y Janine asistían asiduamente a la capellanía universitaria y como todas las semanas se ocupaban de la animación litúrgica en la misa donde se produjo el ataque islamista. Y también Samar y Nahid, que murieron en Gaza durante la ofensiva del ejército israelí, como miles de otras víctimas civiles, formaban parte del Grupo Santa Ana, una confraternidad de mujeres cristianas católicas y ortodoxas de Gaza que hacen un camino de fe con encuentros semanales de oración y catequesis, y actividades apostólicas, sobre todo de ayuda a los pobres y los discapacitados.

Según los datos recogidos por la Agencia Fides, en 2023 fueron asesinados en todo el mundo 20 misioneros: 1 obispo (Mons. David O'Connell), 8 sacerdotes, 2 religiosos no sacerdotes, 1 seminarista, 1 novicio y 7 laicos y laicas . África vuelve a ser el continente donde se produce el mayor número de estos asesinatos, aunque considerando individualmente a los países, Nigeria y México siguen siendo los más trágicamente afectados, con 4 misioneros asesinados cada uno.