Los católicos filipinos hacen una petición para la canonización de un devoto mariano
Manila (AsiaNew/Cbcp)- En el año dedicado a los laicos, un grupo de católicos filipinos hicieron una petición formal para la canonización de un laico originario del grupo étnico llongoo; la iniciativa inició el 30 de abril pasado en el auditorio de la Universidad San Agustín en Lloilo City, en la región de Visayas Occidentales. Llamada "Una oración por la causa de un santo llongoo: Amador M. Tajanlangit, Sr, ejemplo de devoción a la Virgen María", la petición es obra de los amigos de Amador (FAMTSr), con el reconocimiento del p. Joenick Territorio, director de la Comisión arquidiocesana para los laicos de Jaro (provincia de Lloilo y de Guimaras).
Partiendo de la decisión de la Conferencia episcopal filipina (Cbcp), que declaró al año 2014 como el "Año de los laicos" tomando como lema "Llamados a ser santos, enviados como héroes", los promotores de la petición pro-canonización esperan "cumplir nuestra misión". Nerissa P. Pamplona, presidente de la FAMTSr, subraya que muchos entre los fieles más ancianos recuerdan bien la figura de Tay Amador, como era llamado por su testimonio entusiasta y por sus actividades de apostolado creativo.
Los testigos cuentan que ya desde chico, Tajanglangit (nacido el 30 de abril de 1911) había construido un pequeño cine artesanal donde reunía a sus conocidos para hacer ver a ellos películas y documentarios de naturaleza religiosa, dedicados a la vida de los santos o a las apariciones de la Virgen María. Devoto convencido de la Virgen, él dio vida al tradicional "Rosario al alba", transmitido cotidianamente por la radio nacional de las 4 a las 5 de la mañana. Y promovió la distribución de libros de oraciones y coronas del Rosario en las zonas más remotas de la región.
Las personas amaban a tal punto a Tay Amador que lo llevaban en andas, a pesar de su enorme peso. En un coche llamado karosa o duyan, para permitirle atravesar ríos y alcanzar zonas montañosas y difíciles. El día de su muerte el 9 de marzo de 1977, a la edad de 65 años, unas 10 mil personas llenaron la catedral de Jaro para darle el extremo saludo.
Mientras tanto vienen a la luz testimonios de milagros y gracias hechas por Tay Amador, a enfermos y sufridos. Jeremiah Vardeleon cuenta en el Augustinian, periódico de la universidad de S. Agustín, del caso de Julie Ann Aninon. El 2 de marzo de 2013 la niña, que tenía en esa época 12 años, fue atropellada por un medio de transporte público, causándole u grave trauma; el tío, desesperado, le puso una imagen de Tay Amador junto a su cama e inició a rezar incesantemente por su sobrevivencia. Después de 3 meses, la joven recuperó totalmente sus fuerzas, haciendo gritar "milagro" a la familia.
En el documento que declaró el 2014 el "Año de los laicos", los obispos filipinos dirigieron un fuerte reclamo sobre las responsabilidades y deberes de los cristianos en la vida pública, partiendo de la lucha a la corrupción hasta la defensa de la vida. En este año, lo prelados tratan de evocar con fuerza el tema de la "coherencia entre fe y vida cotidiana" de los católicos, indicando una metodología que prevé un mayor compartir entre los laicos de la propia esperanza y de la propia fe.