Los 50 años de las Misioneras de Santo Tomás: la misión ad gentes de la Iglesia siro-malabar
El instituto misionero, nacido en Kerala, también tiene sedes en Europa y América. Cuenta con 345 miembros y 200 seminaristas, de los cuales un centenar están en el seminario mayor. No hay desconfianza ni desaliento, aún en medio de dificultades y persecuciones. La tarea que desarrollan en la India y en China.
Pala (AsiaNews) – En la ciudad de Pala (Kerala), se está llevando a cabo, desde el 13 de noviembre hasta mañana, el convenio de misiología titulado “Rol y relevancia de los institutos y congregaciones misioneras en la misión ad Gentes y en la Nueva Evangelización” (Role and Relevance of Missionary Societies and Congregations in Mission ad Gentes and New Evangelization). La organización está a cargo del Instituto de Misioneros de Santo Tomás (MST), que lleva adelante una reflexión sobre su vocación misionera, en ocasión del 50mo aniversario de su fundación. Los misioneros de Santo Tomás constituyen una realidad misionera aún joven y en expansión. Conforman el primer instituto exclusivamente misionero de la Iglesia siro-malabar del Kerala, también conocido, por su origen apostólico, como “los cristianos de Santo Tomás”- Los misioneros de Santo Tomás expresan, por lo tanto, la decisión de esta Iglesia de asumir un compromiso pleno en lo que se refiere a la actividad misionera ad gentes.
La Iglesia siro-malabar cuenta con 4,5 millones de fieles, y expresa una vitalidad cristiana impresionante. La India es el país que tiene el mayor número de misioneros enviados al mundo. Y Pala en particular, lugar donde se desarrolla el convenio y donde nacieron los misioneros de Santo Tomás en 1968, es la diócesis india con el mayor número de candidatos a la vida ministerial y religiosa.
En la India, los fieles viven graves desafíos en su misión cotidiana: el fundamentalismo religioso, que persigue a los cristianos; el nacionalismo, que busca marginalizar y apagar la vida de las Iglesias; la confrontación diaria y el diálogo de la vida con los creyentes de otros credos.
El convenio, que ha sido aguardado por cerca de 50 misioneros y estudiosos, representantes de numerosas sociedades y congregaciones misioneras, tanto masculinas como femeninas, se inauguró con una intervención de largo aliento: la del obispo de la diócesis de Pala, Mar Joseph Kallarangatt, el teólogo con vida más conocido de la Iglesia siro-malabar. El director general de los MST, el Pbro. Kurian Ammanathukunnel, delineó la historia del Instituto, que se propone enviar misioneros para la evangelización de la India. En efecto, la India es un subcontinente con muchos Estados, con lenguas y culturas completamente diversas. Para los misioneros de Santo Tomás, salir de Kerala y evangelizar en otras zonas de la India es un verdadero y auténtico acto de salida misionera. Los misioneros también evangelizan en otras naciones en Europa (incluso en Italia) y en las Américas, siguiendo lo solicitado por los obispos locales. El instituto está creciendo notablemente: en este momento cuenta con 345 miembros y con 200 seminaristas, de los cuales unos cien asisten al seminario mayor.
En el convenio también están presentes otros institutos misioneros de origen indio, como las Carmelitas de María Inmaculada, las Hijas de Santo Tomás y la Congregación de las Clarisas franciscanas. A esta última congregación, nacida en Kerala y que cuenta con más de 7000 religiosas, pertenecía Santa Alfonsa, que fue canonizada por Benedicto XVI (en 2008, siendo la primer fiel de la Iglesia siro-malabar en ser canonizada) y que era originaria, precisamente de Pala. Aquí también se encuentra el gran santuario dedicado a ella. A la misma congregación de Kerala pertenecía Sor Rani Maria Vattalil oriunda de Indore (Madya Pradesh), que fue asesinada por orden de unos terratenientes en 1995, y beatificada el 4 de noviembre pasado. Su conmovedora historia sigue siendo noticia: su asesino cambió de vida, fue liberado a pedido de la familia de la heroica monja, y participó en la beatificación de su víctima.
En el convenio, tomaron la palabra representantes de congregaciones misioneras, como fue el caso de los Misioneros de San Francisco Javier y del Instituto misionero de la India, ambas, expresiones misioneras de la Iglesia india.
Durante las intervenciones, se prestó mucha atención a comprender los desafíos de la misión, particularmente en la India. El pensamiento misionero expresado por los estudiosos presentes, tal vez de un modo muy profundo e innovador, se confronta con una misión que evoluciona y cambia, aceptando a fondo la complejidad de los retos actuales. No se siente desconfianza ni desaliento alguno, ante las graves dificultades e incertidumbres respecto al futuro. La iglesia en la India conoce desde siempre la realidad de la marginalidad (representa el 2.3% de la población) pero se ha mantenido fiel a su propia tradición, que es antiquísima, a pesar de las innumerables oposiciones e incomprensiones (que en el pasado, incluso provenían de la Iglesia colonial). Hoy, más que nunca, hay una conciencia de que, sin importar cuán antigua y prestigiosa sea, no hay Iglesia sin misión.
En el convenio también participan miembros de sociedades misioneras de otros países asiáticos. El PIME, que está presente en la India hace 150 años, es representado por quien suscribe esta nota, que ha hecho una descripción de los desafíos misioneros de China, y ha resaltado la fuerte conexión histórica que existe entre la misión en la India y aquella en China.
06/11/2017 10:00
01/08/2017 11:52