Loikaw, nuevo obispo Celso Ba Shwe: 'La mitad de la diócesis desplazada, pero seguimos adelante’

Nombrado recientemente por el Papa Francisco, el prelado dijo a AsiaNews que la situación de la Iglesia local -fundada por los padres del PIME- es "la típica de este contexto" de conflicto civil. Entre los desplazados internos también hay muchos sacerdotes y monjas que viven en tiendas de campaña al borde del bosque. La diócesis estuvo sin obispo cerca de dos años.

Loikaw (AsiaNews) - El Vaticano nombró a mons. Celso Ba Shwe obispo de la diócesis de Loikaw, capital del estado birmano oriental de Kayah, uno de los lugares más afectados por el conflicto civil, pero también una de las ciudades donde está más radicada la presencia cristiana en Birmania. Durante cerca de dos años, la diócesis no contaba con un pastor propio después de la muerte de mons. Stephen Tjephe.

“Estoy muy emocionado”, dijo el nuevo obispo a AsiaNews. “Es una situación difícil, pero Dios me ha pedido que haga algo por mi pueblo. Estoy contento, pero también subordinado a la voluntad de Dios y por eso trataré de hacer lo mejor posible de mi parte. Es una gran responsabilidad y un gran reto el que me han dado”.

Desde el golpe de Estado de febrero de 2021, con el que el ejército derrocó al anterior gobierno civil liderado por Aung San Suu Kyi e inició un brutal conflicto interno, la Iglesia local de Loikaw, fundada en 1988 por misioneros del PIME, es objeto de repetidos bombardeos. Decenas de miles de personas huyeron buscando refugio en otros pueblos y en el bosque.

“La situación de la diócesis es la típica de esta realidad”, explicó mons. Ba Shwe, refiriéndose a la guerra civil. “Hay 40 parroquias en la diócesis, pero la mitad están desplazadas. Muchos sacerdotes y monjas también se alojan en tiendas de campaña en campamentos de refugiados o en el bosque”, agregó el prelado.

“En los dos años que no tuvimos obispo, yo fui administrador diocesano. Fue muy exigente porque esperábamos que la crisis [tras el golpe de Estado] durara unos meses y en cambio después de más de dos años todavía estamos en esta situación. Es un trauma para mí ver sufrir a mi pueblo y estoy un poco cansado, pero sé que Dios me ayudará y protegerá en esta tarea”, continuó el obispo Shwe.

Nacido en 1964 en Moblo, una aldea que forma parte de la diócesis de Loikaw, obtuvo un bachillerato en historia de la Universidad Estatal de Yangon antes de ingresar al seminario menor de St. Teresa en Taunggyi. Luego completó sus estudios de teología en el seminario mayor de St. Joseph en Pyin Oo Lwin y Yangon.

En 1994 fue ordenado sacerdote y luego ocupó varios cargos. Entre ellos están el de asistente parroquial en Doungankha, director diocesano de evangelizadores voluntarios y de la juventud, fiscal general de la Conferencia Episcopal de Birmania en Yangon, párroco en dos parroquias diferentes, vicario general de Loikaw y, finalmente, administrador diocesano desde 2020.

“Muchas personas de buena voluntad me han ayudado en los últimos dos años”, admitió mons. Ba Shwe. “Feligreses, voluntarios, simpatizantes, benefactores extranjeros y nacionales. Con el apoyo de todos podemos seguir adelante y hacer algo bueno aquí”, dijo.