Las prohibiciones de Trump favorecen a los fundamentalistas en Irán

Se verán afectados más de 12 mil estudiantes, académicos y personalidades de la clase media, por lo general críticos del régimen de los ayatolás. Las consecuencias sobre las elecciones presidenciales arriesgan la renovación del mandato de Hassan Rouhani.

Teherán (AsiaNews) - La nueva orden ejecutiva de Trump sobre prohibición de visado para seis países predominantemente musulmanes animará a los fundamentalistas en Teherán, a saber, la Guardia Revolucionaria (el Pasdaran) y los ayatolá más conservadores. De esto están convencidas varias personalidades iraníes de negocios y la cultura.

A principios de esta semana, el presidente de Estados Unidos ha puesto en marcha una nueva directiva que, a diferencia del anterior, permite a los iraquíes a viajar a los Estados Unidos, al tiempo que reafirma la prohibición de seis países como Libia, Somalia, Yemen, Sudán, Siria e Irán. Esta prohibición estará vigente durante al menos 90 días.

Los primeros en ser afectados serán los estudiantes e investigadores iraníes. El año pasado más de 12 mil de ellos han estudiado en los EE.UU. Muchos de ellos ya han pagado los derechos y honorarios de residencia para este año y están incluidos en los programas de grado y posgrado. Gracias al aviso de Trump corren el riesgo de perder un año de estudio y permanecer en estado latente indefinidamente.

También hay iraníes que se trasladaron a los EE.UU. después de la caída del Sha y la incautación del poder por Jomeini, que se han naturalizado en los Estados Unidos y que no pueden tener relaciones con sus familiares y miembros de la familia que permanecen en Irán.

De hecho el anuncio de Trump afecta a personas de clase media alta de Irán, que en general son vistos como críticos del régimen de los ayatolás. Además, el movimiento del presidente de Estados Unidos parece querer humillar las medidas de conciliación del Presidente Hassan Rouhani, a favor a su vez de las fuerzas conservadoras.

Tras la firma del acuerdo sobre el programa nuclear de Teherán, los Estados Unidos sigue manteniendo un embargo sobre el uso del dólar en las transacciones bancarias con Irán. Esto no permite que muchos países comercien en paz y seguridad con Irán por temor a represalias y multas por parte de las autoridades de Estados Unidos. Esta prohibición es probable que cancele los posibles beneficios económicos derivados del acuerdo y sobre todo ofrece un espacio crítico de los radicales contra Rouhani, que habría obtenido algo "inútil".

Ya en la actualidad, las posibilidades de que Rouhani sea reelegido como presidente en las próximas elecciones de mayo son muy exiguas. Los radicales pueden seguir utilizando la consigna de que "los EE.UU. es enemigo de Irán."

Muchos iraníes permanecen aturdidos por el anuncio de Trump por el hecho de que una vez más entre los países peligrosos, que apoyan el terrorismo, no son mencionados ya sea Arabia Saudí o los Emiratos Árabes Unidos, los países a los que pertenecían la mayoría de los 19 miembros que llevaron a cabo el ataque a las torres gemelas el 11 de septiembre de 2001.