Las guerras en Medio Oriente y en el Norte de Africa privan a 13 millones de niños de su derecho a estudiar
Bagdad (AsiaNews) - Los conflictos en curso en Medio Oriente y en el Norte de Africa han privado a más de 13 millones de niños de su derecho a la educación y de la posibilidad de frecuentar la escuela, a menudo demolida o dañada por los bombardeos. Es lo que surge de un estudio elaborado por la agencia especializada de las Naciones Unidas, según el cual sólo en Siria, Irak, Yemen y Libia ya fueron destruidas por lo menos 9.000 escuelas, que ya no pueden ser utilizadas como lugares aptos para el estudio.
Activistas y grupos a favor de los derechos humanos en Medio Oriente y en el Norte de Africa refieren que no se trata sólo del daño físico provocado a las escuelas, sino que existe también la “desesperación” advertida en una generación entera de alumnos, quienes ven su esperanza y su futuro “hechos añicos”.
Los 13.7 millones de niños -datos surgidos de un estudio de la ONU titulado "Educación atacada"- a quienes se les niega hasta hoy la posibilidad de estudiar, representan el 40% de los niños en edad escolar de Siria, Irak, Yemen, Libia y Sudán. Según las proyecciones que hacen los expertos de las Naciones Unidas, la cifra podría alcanzar al 50% en los próximos meses.
En el año 2014 se registraron al menos 214 ataques contra escuelas e institutos educativos en Siria, Irak, Libia, el territorio palestino, Sudán y Yemen. En particular en Siria, en el año 2011, cuando se inició el conflicto, una de cada cuatro escuelas tuvo que cerrar sus puertas, privando a por lo menos dos millones de niños del derecho a estudiar.En la región se ha vuelto, y cada vez más, una "práctica común" asesinar, secuestrar y arrestar sin prueba alguna a estudiantes, docentes y personal educativo.
El denegado derecho al estudio afecta también a las familias cristianas y yazidíes oriundas de Mosul y de la llanura de Nínive, que abandonaron a toda prisa sus casas y sus tierras en el verano del 2014, para huir de la violencia del Estado Islámico. Lo relata el Padre Samir Youssef, de 41 años, sacerdote caldeo de Mosul, y desde el 2009 párroco en Inshke, en la diócesis de Amadiya -Dohuc, donde brinda servicio a cinco pueblos-. Él es uno de los protagonistas del video “Adopta un cristiano de Mosul”, la campaña lanzada por AsiaNews para apoyar a los prófugos perseguidos por las milicias yihadistas.
En su zona son hospedadas 350 familias yazidíes; 85 familias cristianas;decenas de familias musulmanas. “El año pasado - afrima del P. Samir - el 80% de estos niños perdieron el año escolar”. El objetivo para los próximos meses, agrega, es “encontrar los fondos para permitir que ellos puedan pagarse la cuota del autobus para que los lleve a la escuela en las grandes ciudades”, porque “no todos los pueblos tienen una escuela”.
21/04/2021 10:15