Las "ambiguas" relaciones de Dusambé con el Afganistán (pre)talibán
En Tayikistán, la embajada en Kabul sigue activa con el representante nombrado por el anterior ejecutivo de Ghani, antes del ascenso de los estudiantes coránicos. Dudas sobre la gestión de la estructura y la cobertura de los gastos de funcionamiento. Las sombras sobre las relaciones políticas y económicas entre los dos países.
Moscú (AsiaNews) - En Dusambé, la embajada de Afganistán que se remonta al gobierno anterior al retorno de los talibanes, en agosto de 2021, sigue sorprendentemente activa, bajo la protección del gobierno tayiko, en fuerte tensión con los actuales dirigentes de Kabul. El embajador Mohammad Zahir Agbar, nombrado por el gobierno de Ashraf Ghani, conservó la sede diplomática y se considera el auténtico representante del pueblo afgano.
Entonces Agbar llevó a cabo una acción demostrativa, rompiendo descaradamente delante de los periodistas la carta que los talibanes habían hecho circular a través de las redes sociales, informando de la decisión del ministro interino de Asuntos Exteriores en Kabul, Amir Han Muttaki, de nombrar primer secretario de la embajada en Dusambé a un nuevo representante del actual gobierno. Lleva dos años residiendo en Tayikistán, pero hasta ahora no ha querido hacer declaraciones directas.
Impugnando la decisión, Agbar declaró que "hasta que no se establezca una estructura gubernamental legal, este tipo de cartas no tienen ningún valor jurídico para nosotros". En los dos años transcurridos desde su regreso al poder, los talibanes no han mantenido relaciones con la embajada; sin embargo, el pasado mes de marzo difundieron la noticia de que representantes del gobierno de Kabul visitaron la representación diplomática en la ciudad de Khoruǧ, donde se encuentra el edificio del consulado general afgano, dañado en febrero por un corrimiento de tierras. Las autoridades tayikas no confirmaron oficialmente la visita de la delegación afgana, pero tampoco la negaron.
En respuesta a los periodistas, el embajador Agbar explicó que el consulado en Khoruǧ está cerrado por "falta de posibilidades económicas" para mantener las instalaciones y el personal, que actualmente trabaja en Dusambé. En cualquier caso, precisó el diplomático, "el representante del consulado en Khoruǧ no tiene ninguna relación con los talibanes". Muchos países de la región, empezando por Irán, han puesto sus representaciones diplomáticas a disposición de los talibanes que han regresado a Kabul, pero Tayikistán no ha querido ceder en este punto.
Desde hace dos años, ningún representante de Afganistán ha sido reconocido en Dusambé, y no se ha concedido ninguna legitimidad al gobierno talibán, protegiendo a los representantes del antiguo gobierno. Sin embargo, las relaciones económicas y comerciales entre ambos países no se han interrumpido, teniendo en cuenta que gran parte de la población afgana es de etnia tayika. En concreto, Dusambé suministra electricidad a gran parte del país vecino.
Agbar informa de que los servicios consulares nunca se han interrumpido, también porque "ningún país ha reconocido oficialmente a los talibanes, y nuestros visados siguen considerándose válidos en todo el mundo". Los periodistas preguntaron cómo se las arregla para cubrir los gastos de funcionamiento de la embajada, dada la falta de relaciones con Kabul, pero el embajador no dio una respuesta directa. De hecho, el edificio parece prácticamente vacío, con muy poco personal en activo.
Afganistán sigue fuera de la ONU y de toda convención internacional, y Tayikistán entre los países vecinos mantiene la postura más intransigente, reclamando un gobierno acordado e "inclusivo" de todas las nacionalidades, algo que los talibanes no parecen querer conceder de hecho. Mientras tanto, se mantienen todas las ambigüedades de las relaciones políticas y económicas, a la espera de ver en qué medida los conflictos en curso pueden afectar también a esta situación en los territorios centroasiáticos, pero también en otras latitudes asiáticas y no sólo en ellas.
30/09/2021 11:23