La junta birmana utiliza misiles y drones iraníes para sofocar la resistencia
Desde febrero de 2021 los generales de Myanmar y los ayatolás han estrechado relaciones en materia de colaboración militar. Para Teherán se han abierto "nuevos espacios de mercado". Los tres viajes de un Boeing 747 de Qeshm Fars Air entre enero y abril de 2022 y el viaje de una delegación vinculada a los Pasdarán.
Teherán (AsiaNews) - Desde el golpe militar en Myanmar en febrero de 2021 -que derrocó al gobierno democrático encabezado por Aung San Suu Kyi, actualmente bajo arresto- las relaciones entre Teherán y Naypyidaw en el tema de las armas se ha ido consolidando cada vez más, en particular con los misiles y drones que utiliza la dictadura para atacar a los grupos rebeldes y aniquilar a su propio pueblo, sin perdonar mujeres, niños y objetivos civiles como las escuelas. Un reportaje del diario birmano The Irrawaddy revela los lazos entre ambos países y los "nuevos espacios de mercado" que se han abierto en los últimos dos años para los ayatolás, que no desdeñan estrechar lazos con los generales.
El año pasado, entre enero y abril, un avión de carga Boeing 747 de la compañía Qeshm Fars Air (sujeta a sanciones estadounidenses por entregar suministros a las milicias pro-Teherán que intervienen en el conflicto sirio) procedente de Mashhad aterrizó tres veces en la capital y en Rangún. Según la información, en una ocasión transportó al menos 21 cajas que contenían drones y motores para vehículos militares. Un segundo envío, que aterrizó en Naypyidaw, habría consignado a la junta militar armas más poderosas y sofisticadas de fabricación iraní, entre ellas misiles teledirigidos.
Fuentes del diario birmano informan también que el 13 de enero llegó a Myanmar una delegación iraní compuesta por personas vinculadas a los Guardianes de la Revolución (Pasdaran). Una de ellas sería Gholamreza Ghasemi, ex comandante y piloto que fue arrestado en Argentina el año pasado bajo sospecha de tráfico de armas a bordo del 747 en el que viajaba. Ghasemi también es miembro de la junta directiva de Qeshm Fars Air y se dice que pilotó personalmente el avión en el cual llegó a Myanmar.
Antes del golpe militar las relaciones entre Naypyidaw y Teherán eran distantes y esporádicas, pero desde febrero de 2021 la situación ha cambiado y la Junta -a diferencia del gobierno democrático- ha confiado cada vez más en Irán para conseguir suministros, comenzando por drones y misiles guiados. Esa información también fue confirmada por ex pilotos y soldados birmanos que han abandonado el ejército en los últimos años para no ser cómplices de la violencia militar contra la población civil. El motor del dron MD550 es fabricado por una empresa iraní llamada Mado (Oje Parvaz Mado Nafar), que se encuentra en la lista de sanciones de EE. UU. desde octubre de 2021.
También se han intensificado mucho desde el golpe las relaciones entre Myanmar y Rusia con la compra de aviones de combate, helicópteros y otros equipos militares. Según un informe reciente de la ONU, la junta de Myanmar ha importado al menos mil millones de dólares en armas y equipo militar desde febrero de 2021, en su mayoría de Rusia y China.
Volviendo a las relaciones entre los ayatolás y los generales, en 2016-17 el ejército de Myanmar había enviado un equipo de ingenieros militares a Irán para aprender las técnicas de reacondicionamiento de los viejos aviones de entrenamiento, teniendo en cuenta la capacidad de Teherán para perfeccionar la tecnología de los mismos. Después de las sanciones occidentales en respuesta al golpe y la represión del pueblo, el régimen birmano fortaleció el comercio con Rusia, China, India, Bielorrusia e Irán. En los últimos tiempos la Junta utiliza el hardware militar para intensificar la campaña aérea y terrestre contra las fuerzas de resistencia y los grupos rebeldes karen, kachin, kayah y mon y en las regiones de Sagaing y Bago.
17/04/2023 15:45
17/01/2020 10:39