La diócesis católica romana de Vinh contra la sentencia de condena a los dos feligreses de My Yen

de J.B. An Dang

En un comunicado oficial, los líderes de la Iglesia atacaron la manera en que se celebró el juicio. La opinión pública apoya a los dos activistas, que luchan por los derechos y la libertad religiosa. Protestan por la falta de comunicación a los familiares de la audiencia en la corte. Sin embargo, según expertos del derecho podrían haber procesos nuevos (y condenaciones) en contra de los dos.

Vinh (AsiaNews) - La diócesis católica romana de Vinh condena enérgicamente el veredicto que llevó a la cárcel a los dos católicos de la parroquia de My Yen, protagonistas de la lucha por la libertad religiosa y los derechos humanos. En un comunicado oficial publicado el 26 de octubre, la curia ataca sin rodeos "el camino que se jugó en el llamado proceso 'público' contra los feligreses de My Yen" por el Tribunal popular de la provincia de Nghe An. Fuertes acusaciones en contra de la sentencia que, para los medios de comunicación estatales, "castiga el delito" cometido por los dos hombres; de hecho, no es sorprendente, la "opinión pública" vietnamita e internacional sabe bien "cómo obra y maneja el gobierno estos casos: culpando a los civiles [inocentes], para cubrir la mala conducta de los funcionarios públicos".

El 23 de octubre del año pasado, los jueces de la corte de Vinh, en la provincia de Nghe An, han condenado a Ngo Van Khoi de 53 años a siete meses de prisión y a Nguyen Van Hai, de 43 años, a seis meses en la cárcel. La audiencia duró unas tres horas, durante un proceso a puerta cerrada que incluso la familia no había sido advertida. Su detención había provocado una serie de protestas callejeras, reprimidas por la fuerza por la policía y los enfrentamientos de diferentes niveles entre funcionarios gubernamentales y representantes de la líderes católicos, incluyendo el mismo obispo de Vinh, mons. Paul Nguyen Thai Hop.

Los líderes de la diócesis católica romana de Vinh afirman que "la opinión pública es absolutamente contraria a la sentencia injusta y ambigua" de los jueces a expensas de los feligreses de My Yen, arrestados en junio pasado y detenidos por semanas sin siquiera una acusación formal. Después de meses de cárcel y (falsas) promesas de liberación, ellos fueron condenados por "alterar el orden público" después de un proceso de unas pocas horas.

La diócesis en su comunicado también confirma que la familia no ha recibido ninguna notificación de la audiencia en la corte, aunque ' una notificación de consulta es necesaria " de enviar antes del juicio a los acusados, especialmente en un caso como éste de "importancia pública". Por otro lado, según los medios oficiales, los procedimientos adoptados por las autoridades eran "transparentes" y el público "aprobó" el resultado de los procesos en la corte. Fr. Paul Nguyễn Văn Hiệu, el firmante del documento, recuerda que "La diócesis católica romana de Vinh continúa solicitando a las autoridades la liberación incondicional de Ngo Van Khoi y Nguyen Van Hai " y "el resarcimiento para ellos de los daños".

Sin embargo, según algunos expertos de la ley vietnamita, el asunto de los dos feligreses de My Yen no terminó con la condena de siete y seis meses en la cárcel; De hecho, es probable que se intente de nuevo sobre la base de otros cargos, lo cual se traducirá en nuevas- y aún más severas condenas. La comunidad local está todavía en estado de shock tras el veredicto y grita en voz alta su inocencia. La aparente "dulzura" del juicio podría confirmar las dudas a juzgar por las autoridades, que querían dar una condena simbólica; de hecho, ahí detrás podría estar un "diseño oscuro" del liderazgo local para castigará con mano más dura a los dos hombres.

Cómo explica el disidente y abogado Nguyên Van Dai a Eglise d'Asie (EdA), el primer veredicto fue utilizado para "probar" la reacción de la opinión pública, midiendo su fuerza y alcance. La condena se basó en el delito de "alteración del orden público", pero siguen estando abiertos otros tres cargos capitales: incautación ilegal de personas, destrucción de propiedad y lesiones voluntarias. Si se llega a otro juicio y a otra condena, la duración de la detención de los dos católicos sería mucho mayor. Confirmación indirecta proviene de la agencia estatal vietnamita, que en un despacho afirma: "con respecto a los otros cargos, el juez instructor les ha retirado del expediente principal para juzgarlos, posteriormente [...]".