Líder palestino: el acuerdo Israel-Emiratos no favorece la paz

La firma oficial tendrá lugar en Washington, dentro de tres semanas. En tanto, EAU e Israel inauguran una línea telefónica directa. Aplauso de la comunidad internacional, con la excepción de Irán y Turquía. Bernard Sabella: la promesa de suspender el plan de anexión causó muchas sorpresas. Urge una plana de líderes fuerte y unida, que sea capaz de recuperar las relaciones con todas las naciones árabes.

Ramalllah (AsiaNews) - Los palestinos “desean la paz” y todo acuerdo que pueda poner fin a cien años de conflicto es positivo; sin embargo, las relaciones diplomáticas entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) se han establecido “sin que los palestinos fueran informados de ninguna manera”, y esto los relega a una posición de mayor marginación. Es lo que cuenta a AsiaNews Bernard Sabella, representante de Fatah y secretario ejecutivo del servicio a los refugiados palestinos del Consejo de las Iglesias del Oriente Medio. Para Sabella, el hecho de “suspender” el plan de anexión “despierta sorpresas e interrogantes sobre su real eficacia”. “Esto es un punto para el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y para el presidente de los EEUU Donald Trump - agrega - y no tiene ninguna validez global, no determina un acuerdo omnicomprensivo con los palestinos”.

El beneficio del acuerdo entre Israel y los EAU “solo es válido para Israel”, pero no hay verdaderos avances en lo que respecta a un “proceso de paz paralizado y tampoco en cuanto a la solución de los dos Estados. Este es el verdadero punto”, para el líder católico. “Si se quiere una paz de verdad - agrega - hay que involucrar a los palestinos y trabajar por el fin del conflicto”. En este sentido, prosigue, “si a futuro hay nuevos acuerdos con otras naciones árabes, como Bahréin u otras, lo que anhelamos es que haya, no digo la aprobación, pero al menos una participación de los palestinos”.

Tras firmar el acuerdo, en estas horas Israel y los Emiratos han inaugurado una línea telefónica directa. La comunidad internacional ha recibido con beneplácito la medida, que fue condenada como una “puñalada en la espalda” por los líderes palestinos (en este caso, Fatah y Hamas se unieron) por Irán y Turquía.

Al término de una conversación con el homólogo de los Emiratos, Abdullah bin Zayed al-Nahyan, el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Gabi Ashkenazi, anunció que “pronto” los líderes de las dos naciones “se reunirán” y aunarán esfuerzos en la lucha contra la pandemia de Covid-19. La firma del acuerdo tendría lugar dentro de tres semanas en Washington, con el patrocinio del presidente de los EEUU. Para los líderes palestinos, el pacto es un “regalo a Israel”, y su único objetivo es colaborar con los planes electorales de Trump y Netanyahu. El príncipe heredero de Abu Dabi, Mohammed Bin Zayed, destacó que una de las consecuencias del pacto es la “interrupción de los planes de anexión de Israel”.

“Los Emiratos son una gran nación - subraya Bernard Sabella -; allí trabajan muchos palestinos, y en términos generales, las condiciones son buenas. En este sentido, representan un ejemplo; igualmente el hecho es que esta apertura oficial de las relaciones no va alterar en nada el núcleo del problema israelí-palestino. Para lograr una paz de verdad, hay que trabajar para poner fin al conflicto. Desde el punto de vista de los EAU, la firma del acuerdo es importante porque reforzará su posición en relación con Irán, reafirma los lazos con Washington y reactiva una importante colaboración en el plano económico y tecnológico, aunque las limitaciones en el ámbito estratégico sigan siendo evidentes”.

En tanto, la cúpula de líderes de Palestina, cada vez más dividida entre un frente “dialogante, Fatah, que pierde terreno respecto a los extremistas de Hamas” queda en el trasfondo y marginada del proceso político y de la toma de decisiones. “No podemos hacer nada - afirma el líder católico - excepto esperar que el gobierno de los Emiratos sea sabio en la aplicación del acuerdo y abierto a compartir los detalles. De lo contrario, la Autoridad palestina podrá debilitarse cada vez más, no solamente en el frente interno, sino también a nivel regional e internacional. Por eso es esencial restablecer los contactos con todas las naciones árabes, sin excepción”.