Khulna: El ciclón Yass deja 26 aldeas sin comida ni agua potable

de Sumon Corraya

La inundación provocada por el ciclón Yass ha destruido una zona donde viven 30.000 personas. Muchos han perdido su trabajo debido a los daños en cultivos y piscifactorías. La ayuda demora en llegar.

Dhaka (AsiaNews) - Dhaka (AsiaNews) - El ciclón Yass - que azotó la India y Bangladés en los últimos días y causó la muerte de al menos a seis personas - ha provocado graves consecuencias en la región de Khulna, al sur de Bangladés. La inundación ha cubierto y devastado campos, estructuras y hogares, dejando una amplia zona de la región costera sin agua potable ni suministros de alimentos.

"Con el paso del Yass todos los embalses fueron invadidos por agua salada, por eso tenemos que buscar agua a siete kilómetros de aquí", dijo a AsiaNews Shuda Mondol, un ama de casa del pueblo de Ghigrakhati que regresaba de Kolaputa. "Todos los días - agregó Shila Rani, otra mujer que regresa con su contenedor - empleo cinco o seis horas para buscar agua de los pueblos cercanos. Un bidón de agua se termina en un día, ahora estamos bebiendo menos en nuestra familia, compuesta por seis personas".

Como ha destruido los cultivos y las piscifactorías de la región de Khulna, el ciclón dejó a la población no solo sin agua y alimentos sino también sin trabajo; las actividades están paralizadas y una gran parte de los habitantes del lugar cobran por jornada. También se suma el desafío de proporcionar agua a los animales domésticos como vacas y gallinas y la dificultad para usar los baños. Se estima que unas 30.000 personas, repartidas en 26 aldeas, sufren esta situación.

Animesh Biswas, un funcionario local, admitió la escasez de alimentos y la falta de ayuda del gobierno. Varias ONG locales respondieron a la emergencia. Daud Jibon Das, director regional de Caritas en Khulna, dijo que ya se había puesto en contacto con varios donantes para llevar ayuda a las víctimas.

La región de Khulna es una llanura propensa a los desastres ambientales. La mayoría de las casas de la región están construidas con ladrillos de barro y en los últimos años las catástrofes climáticas han destruido miles de casas, árboles y cultivos.