Karachi: en la metrópolis del sur se lucha por el agua, ciudadanos en revuelta
Karachi (AsiaNews/Agencias)- El crecimiento exponencial de la población urbana y el progresivo envejecimiento de una red ya obsoleta han causado una crisis hídrica de vasta proprciones en Karachi, la metrópolis del sur con el mayor número de habitantes de todo Paquistán. Según los expertos el problema está destinado a empeorar con el transcurrir del tiempo, mientras comienza a crecer la ira y el malestar de los ciudadanos, en particular en las periferias. En las favelas y en los barrios pobres las personas han incendiado gomas de autos y lanzado piedras, gritando "queremos agua al menos una vez por semana".
A diferencia de otras ciudades, en las cuales la situación es menos dramática, en Karachi las personas esperan enteras jornadas la llegada de los autobuses y camiones cisterna, están obligados a usar el agua del subsuelo, a menudo contaminada con sal. La reciente sequía contribuyó a empeorar la situación y, en una realidad de 18 millones de personas, la situación está destinada a empeorar.
En los últimos tres meses, lamenta una ciudadana de nombre Yasmeen Islam, no han distribuido "una sola gota de agua en mi barrio", y la protesta "es nuestro último recurso". Pero la situación no es tampoco mejor en los distritos más ricos, done el agua es suministrada a través de auto-tanques que llenan las cisternas sólo algunos días en la semana.
Karachi consume la mayor parte de sus reservas del río Indo, unos 2 billones de litros por día, y otros 1,4 billones del dique de Hub, en el vecino Baluchistán. Sin embargo en los últimos años la sequía puso en seria crisis las reservas y hoy se logra satisfacer sólo la mitad (4,5 billones de litros) de la necesidad cotidiana.
El negocio del agua atrajo el interés de la mala vita, según un volumen de negocios que aumenta con el pasar del tiempo y el aumentar del problema. Los dirigentes de la municipalidad están tratando de construir otro canal para sacar reservas del río Indo, pero si aunque tuviese que iniciar tal proyecto se necesitarán al menos 4 años para terminarlo y funcione realmente.
Mientras tanto los ciudadanos deben investir siempre más recursos o recorrer trayectos siempre más largos, para resolver la cotidiana guerra del agua. Aisha Saleem, anciana habitante de Karachi, denuncia que el agua que reciben de las instituciones es salada. "Cada día mujeres y niños- agrega- están obligados a recorrer quilómetros y quilómetros a pie para buscar agua".
22/08/2017 14:54