25/03/2025, 14.41
SRI LANKA
Enviar a un amigo

Jaffna, la protesta tamil contra la ocupación militar y religiosa

de Melani Manel Perera

Desde 1990 las familias tamiles de Thaiyiddy se encuentran desplazadas por la presencia militar. En un predio de seis acres se levanta ahora el templo budista Tissa Vihara. A pesar de que el conflicto terminó  en 2009, las tierras no fueron devueltas. Los propietarios de tierras, apoyados por la Alianza Popular por el Derecho a la Tierra (PARL), denuncian la expropiación forzosa y piden justicia.

 

Colombo (AsiaNews) - Una expropiación "verdaderamente inmoral" es la que ha sufrido el pueblo tamil de Thaiyiddy, Jaffna, que desde 1990 fue desplazado de un área que pasó a estar bajo control militar, situación que se mantuvo incluso después de que terminaron los conflictos en 2009. "No queremos luchar, seguimos actuando de manera pacífica. Necesitamos nuestras tierras. No prevemos ningún tipo de conflicto", declararon los propietarios de las tierras en una conferencia de prensa organizada conjuntamente con la Alianza Popular por el Derecho a la Tierra (PARL) en Colombo el pasado 20 de marzo.

Desde hace años, en el norte de Sri Lanka continúan las protestas de las familias tamiles contra la apropiación ilegal de sus tierras ancestrales. Actualmente en ese lugar se levanta un templo budista - el Tissa Vihara, construido desde 2018 - donde antes había un santuario hindú. La construcción hace temer una cancelación cultural deliberada, porque el budismo no está extendido en el norte y el pueblo tamil es mayoritariamente hindú. Aunque la Constitución cingalesa le da prioridad y se debe actuar para protegerlo y promoverlo. El nuevo templo fue construido sobre seis acres de tierra privada sin el consentimiento de los propietarios o la aprobación de las autoridades del gobierno local.

En el encuentro con la prensa varios propietarios de las tierras en disputa expresaron su punto de vista, aprovechando la oportunidad que les ofrecía PARL. Compartieron experiencias y se dirigieron directamente a los medios del sur, que a menudo han tergiversado el significado de su lucha. Pero los miembros de la comunidad de Thaiyiddy reconocen la ubicación original del templo de Tissa como un lugar de valor histórico y expresaron su protesta apelando al nuevo gobierno, porque consideran que han sido desplazados y oprimidos por la expropiación forzosa de sus tierras.

El actual gobierno, encabezado por el National People's Power (NPP), ha declarado en varias oportunidades que reconoce el derecho de la población del norte a utilizar sus propias tierras. Pero, para que esto se haga realidad, la Alianza Popular por el Derecho a la Tierra (PARL) pide al gobierno que reconozca el derecho a la tierra de las personas que la reclaman según la ley y que dé prioridad a sus voces.

Sukumari Sarujan, una propietaria, explicó que  en el templo hay una placa donde dice que este fue construido enteramente con la contribución de los militares. "¿Hasta qué punto es razonable apropiarse de tierras que pertenecen legítimamente a familias tamiles y construir un templo budista?", preguntó la mujer a la prensa. Otro propietario, Ayyadore Ravindran, de 70 años, que vivía frente al templo de Tissa Viharaya, declaró ante la prensa que fueron desplazados en 1990 y que en aquel entonces había un pequeño templo en su aldea de Thaiyiddy. Durante la época de la pandemia de covid fue clasificada como zona de máxima seguridad, y el templo se convirtió en uno más grande.

A. Sureshkumar contó a los medios que vivió 34 años como desplazado aunque en octubre de 1989 había obtenido el título de propiedad de su tierra, que ahora es propiedad del ejército de Sri Lanka y del Templo de Tissa. "Delante de mi casa había un Kovil (templo hindú, ndr), pero el acceso al Kovil también ha quedado bloqueado por este templo", dijo. Añadió que mientras las autoridades del templo disfrutaban de sus tierras, ellos vivían en casas alquiladas, en condiciones precarias. "No es justo y queremos recuperar nuestras tierras", declaró.

PARL también pide que se lleve a cabo una investigación formal sobre la adquisición forzosa de tierras en los años pasados a las poblaciones del norte y del este en nombre de la construcción de santuarios religiosos y la conservación de sitios arqueológicos. Y que se tomen medidas para restablecer el justo derecho a la tierra de estas poblaciones, a fin de garantizar que esos actos cometidos por el Estado o mediante la intervención de los militares no se repitan en el futuro.

Los propietarios de las tierras de Thaiyiddy afirman que llevan a cabo esta lucha no contra el pueblo cingalés o el budismo, sino solo para recuperar sus derechos de propiedad, y piden a la población del sur que no malinterprete el reclamo de sus derechos como una cuestión racista. "La ley de este país funciona de manera diferente para los tamiles y para los cingaleses" declararon en la conferencia de Colombo. Con una "modificación de la Constitución" se puede tratar a todos por igual.

 

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Mons. Barwa: La herencia de los mártires de Orissa
29/08/2020 11:22
Madhya Pradesh: las autoridades demuelen casas de los musulmanes
13/04/2022 15:22
Madhya Pradesh, grupos nacionalistas intiman a una escuela cristiana para que exponga una estatua hindú
26/10/2021 13:07
Mons. Machado: muchas personas están cuestionando la ley contra las conversiones
07/01/2021 14:04
Karnataka, 23 cristianos convertidos al hinduismo
03/12/2020 16:47


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”