JMJ: desde Turquía hasta Yemen, el viaje de los jóvenes con el Papa a Lisboa

de Dario Salvi

Para los jóvenes turcos es una oportunidad para "construir una Iglesia local", porque pueden encontrarse con cristianos de otras diócesis y vicariatos. En la delegación del Golfo también hay un joven de Yemen. Los libaneses recordarán con un momento de adoración y oración el tercer aniversario de la dramática explosión del 4 de agosto de 2020. Obispo auxiliar de Bagdad: tenemos la esperanza de que Oriente Medio pueda ser la sede de una Jornada.

Milán (AsiaNews) – Para los jóvenes turcos es una oportunidad para “construir una Iglesia local”; la presencia de un católico de Yemen, un país que desde hace años se encuentra sumido en una cruenta guerra donde se han producido masacres y ataques incluso contra la pequeña comunidad cristiana, como el martirio de las religiosas de Adén, "semilla de la Madre Teresa" en la tierra de Arabia; el viaje de los cristianos iraquíes “felices” de representar a la Iglesia de su país y renovar el encuentro con el Papa Francisco después de su viaje apostólico de marzo de 2021; el momento de "adoración y oración" de los jóvenes libaneses para recordar a las víctimas de la dramática explosión en el puerto de Beirut el 4 de agosto de 2020. Estas son algunas de las intenciones que animan el camino de cientos de jóvenes de diversos países de Medio Oriente hacia Lisboa, Portugal, para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que tendrá lugar entre el 2 y el 6 de agosto. El Papa Francisco ha elegido el lema “María se levantó y partió sin demora” -pasaje tomado del Evangelio de Lucas- para la primera convocatoria mundial de la Iglesia dirigida a los jóvenes después de la pandemia de Covid 19.

Para los jóvenes que vienen de Turquía, esta es una oportunidad para "construir una Iglesia local", respondiendo a una necesidad urgente en la que muchas veces ha insistido el vicario de Anatolia, mons. Pablo Bizzeti. El p. Antuan Ilgıt, jesuita y vicario general, explica a AsiaNews las intenciones que animan a los jóvenes de la frontera oriental de Europa a participar en el encuentro con el Papa. Para muchos de ellos el viaje había quedado suspendido, sobre todo los que provienen de las zonas más afectadas por el devastador terremoto que destruyó Turquía (y Siria) en febrero, pero "gracias a la solidaridad y ayuda de la Iglesia de Reggio Emilia” se pudo hacer realidad. “Participan 35 chicas y muchachos” de las diócesis y vicariatos de Estambul, Anatolia y Smyrna. “También hemos incluido -dice el sacerdote- algunos estudiantes católicos africanos y venezolanos que están becados en Turquía. Hay armenios, caldeos, siríacos, recién bautizados, y un par de catecúmenos que, en cierta medida, son una muestra representativa de la Iglesia y de la comunidad cristiana turca". Algunos ya han asistido a Jornadas anteriores, pero "la mayoría es la primera vez que salen de su país y están muy entusiasmados por la posibilidad de viajar a Lisboa y conocer al Papa y a otros jóvenes, y vivir una verdadera experiencia de catolicidad".

El viaje hacia Lisboa ya ha comenzado, en compañía de 1.600 jóvenes de la diócesis de Reggio Emilia (hermanada con Anatolia) y otros 80 jordanos de paso por Italia. “Nos estamos moviendo juntos -cuenta el p. Antuan-. Comenzamos celebrando la Misa en Reggio Emilia y después hubo momentos de intercambio y reflexión. La primera escala fue en Barcelona, donde celebramos una misa en la Sagrada Familia presidida por el jesuita P. Jean Paul Hernandez, después fuimos a Toledo”. También hubo un momento de testimonios, y un joven turco, un italiano y un jordano contaron su experiencia de fe y de vida. "Con los jóvenes de Anatolia -continúa- habíamos comenzado los preparativos antes del terremoto, pero después del desastre íbamos a cancelarlo debido a las dificultades, económicas y de todo tipo, de las familias". Sin embargo, la solidaridad de la diócesis del norte de Italia nos permitió continuar lo que hemos llamado el "camino" de acercamiento a Lisboa. “Los jóvenes -explica el sacerdote- quieren compartir, abrirse a los demás, conocerse entre ellos, incluso entre las diferentes realidades de Estambul, Anatolia y Smyrna, porque no tienen muchas oportunidades para encontrarse dentro del país”. Hasta ahora, concluye el p. Antuan, “los jóvenes y sus acompañantes están muy impresionados por la hospitalidad que les han brindado, por la participación de las familias, por las misas y los cantos, por el entusiasmo que han experimentado. Nuestros jóvenes -concluye- desplegaron banderas turcas y cantaron himnos religiosos por las calles de Barcelona, mostrando lo hermoso que es ser turcos y cristianos".

También están en camino los jóvenes del vicariato apostólico del sur de Arabia (Emiratos Árabes Unidos, Omán y Yemen), cuenta a AsiaNews mons. Pablo Martinelli. Son 250 chicas y muchachos de Emiratos Árabes Unidos (EAU), a los que se suman 20 jóvenes de Omán y "uno de Yemen". "Desde hace varios días están haciendo "una peregrinación por distintos lugares de Europa, en particular Lourdes". Se han preparado durante todo el año. Antes de partir -continúa- hubo un momento de encuentro en Abu Dhabi" a cargo del vicario y algunos formadores, con "meditaciones, animaciones, danzas y cantos inspirados en el tema" de la JMJ. “Los jóvenes -dice- están llenos de entusiasmo, tanto por el camino que están haciendo como por lo que van a vivir en Lisboa”. Posteriormente Mons. Martinelli también se unirá al grupo para participar en el evento. En estos días -cuenta- "los sigo a través de los videos" que publican en las redes sociales. “Están llenos de deseo de encontrarse con otros jóvenes cristianos de todo el mundo para intercambiar experiencias, acoger la palabra de Dios y dejarse 'poner en marcha' por ella, como María hacia su prima Isabel".

La razón de ser de este camino es el "propósito de ser amados y de amar" y "descubrir cuál es la tarea que tenemos en el mundo, la propia vocación". Ellos sienten que están hechos para cosas grandes. Quieren encontrarse con el Papa Francisco, muy querido por nuestros jóvenes, "que mantienen vivo el recuerdo de su viaje de febrero de 2019" para firmar el documento [sobre la fraternidad humana], la celebración eucarística en el estadio de Abu Dhabi y la visita a la catedral de San José". Una presencia que alentó a "encontrarse con todos" y el "compromiso por la paz y la justicia", redescubriendo "la importancia del diálogo con las diferentes religiones, y en nuestro caso, especialmente con los musulmanes". Por último, concluye el vicario de Arabia, "los jóvenes acuden al Papa para ser apoyados en su tarea de salvaguardar la creación: la Laudato Sì es un texto que retomamos a menudo y es un tema que sentimos con fuerza en los Emiratos, en vista de la Cop28 que tendrá lugar en Dubai”.

También participarán en la JMJ un centenar de jóvenes de Irak que ya se encuentran en la capital lusitana, como confirma Mons. Basilio Yaldo, auxiliar de Bagdad y brazo derecho del patriarca caldeo cardenal Louis Rafael Sako. “Están felices -afirma- de representar a la Iglesia católica en Irak” y para guiarlos en este camino los acompañan “siete sacerdotes y cinco religiosas, que también son jóvenes”. Las JMJ, que san Juan Pablo II convocó por primera vez -explica en una reflexión publicada en la web del patriarcado caldeo-, son "una prueba del amor de Dios y una oportunidad de encuentro con los hermanos" y tienen un carácter "universal", porque el objetivo de promover la “fraternidad”. Con la esperanza de que en el futuro un país de Oriente Medio pueda ser el anfitrión del evento, Monseñor Yaldo recuerda que "lo hermoso de estos encuentros es el intercambio de experiencias, el conocimiento de otras culturas y la convivencia como hermanos" sin tener en cuenta "la raza, el género o la etnia". “Con estos encuentros -concluye- se construyen puentes” y los jóvenes se convierten en “instrumentos de paz que el mundo necesita”.

Por último, desde el Líbano se espera que lleguen al menos 475 jóvenes, 200 de los cuales han podido participar en las jornadas portuguesas gracias a la ayuda de la Comisión para la Juventud de la Asamblea de Patriarcas y Obispos Católicos del Líbano (APECL). Otros pertenecen a los diversos movimientos que están presentes en el país (como los neocatecumenales, el Chemin Neuf y la Renovación en el Espíritu), y también hay representantes de algunas diócesis como Antelias y Batroun. Acompaña la delegación el arzobispo greco-católico de Beirut, monseñor Georges Bacouni, junto con ocho sacerdotes que quieren representar lo mejor posible las diversas almas de la Iglesia libanesa. También estarán presentes el presidente de la Comisión para la Juventud Roy Jreich y el capellán p. Charbel Dacaché. La Jornada coincide con el aniversario de la doble explosión en el puerto de Beirut el 4 de agosto de 2020, por eso se decidió hacer ese día una hora de "adoración y oración" en la catedral de Lisboa, en unión "con todos los libaneses del mundo” marcados por la tragedia.

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