Internet: China, Myanmar e Irán, 'campeones' de la censura. Los riesgos de la inteligencia artificial

de John Ai

Según el último informe de Freedom House, Beijing, Naypyidaw y Teherán registran el "peor" ambiente del mundo en lo que se refiere al uso de Internet. La libertad global está en declive desde hace una década, pero el nivel de democracia también ha empeorado en los últimos años. La inteligencia artificial es una nueva herramienta en manos de los regímenes para la desinformación y la censura.

Beijing (AsiaNews) - En 2023 la libertad global en Internet sigue disminuyendo por decimotercer año consecutivo y algunos de los datos y factores más críticos provienen del continente asiático. Este es uno de los resultados del último informe de Freedom House, una ONG con sede en Estados Unidos, según el cual China, Myanmar e Irán son los países con "peores condiciones" en términos de acceso y libertad de movimiento dentro de Internet. El estudio muestra también que otro elemento crítico es la Inteligencia Artificial (IA), que favorece la desinformación pública y la censura en línea.

El informe anual titulado “Libertad en la Red” examinó 70 países, que representan el 88% de la población mundial presente en la red. La tendencia de la última década muestra que el porcentaje de personas que viven en países sin ninguna libertad en Internet está aumentando. En 55 de los 70 Estados estudiados, las personas enfrentan repercusiones legales (incluso penales) por sus discursos o comentarios en línea, una cifra sin precedentes. En este sentido China ocupa el último lugar en términos de libertad en Internet por noveno año consecutivo. En términos de represión y censura, en el penúltimo lugar después de Beijing encontramos al Myanmar de los generales golpistas que derrocaron al gobierno democrático en febrero de 2021, y a continuación al Irán de los ayatolás, en el antepenúltimo lugar del mundo con respecto a la libertad en internet.

China ostenta en este nada envidiable ranking el mayor cortafuegos y el sistema de vigilancia de Internet más rígido del mundo, además de haber bloqueado las principales plataformas de redes sociales y los servicios de Google. Por otra parte, Beijing está adoptando enérgicas medidas contra los usuarios de la web que utilizan VPN para eludir la censura. Este sistema de control y cortafuegos es muy codiciado por otros países y ha sido exportado, por ejemplo, a Rusia y la República Islámica.

En Myanmar las condiciones para la libertad en Internet han empeorado desde el golpe militar, hace dos años y medio. Tanto en Myanmar como en Irán las autoridades han llegado incluso a ejecutar penas de muerte por expresiones o artículos publicados en la red. La coautora del informe, Allie Funk, directora del Departamento de Investigación sobre Democracia y Tecnología de Freedom House, considera que el declive de la democracia en todo el mundo es "una de las principales causas" del colapso de la libertad en Internet a nivel mundial. Otro factor es que China ha promovido con éxito en otros países el concepto de "cibersoberanía".

El estudio evalúa todo el arsenal de tácticas de que dispone la censura con una metodología integral y analítica. La vigilancia, la censura y la desinformación son algunos de los principales desafíos, en los cuales la inteligencia artificial juega un papel cada vez más importante y su desarrollo en el ámbito de la censura y el control ha adoptado una tendencia que los expertos consideran "preocupante". Según el informe, esta tecnología será cada vez más utilizada por funcionarios y analistas de los gobiernos y empresas afines como herramienta de propaganda y desinformación.

En este sentido resulta evidente que la IA se está volviendo cada vez más "eficiente" en la represión de contenidos digitales, y actualmente se utiliza en las principales redes sociales chinas para eliminar automáticamente los contenidos "políticamente sensibles". Además, Beijing está fortaleciendo el control de los contenidos que genera, distinguiéndose como líder en el filtrado y bloqueo del output y de la información generada por los chatbots, asegurándose de que las empresas cumplan con los estándares establecidos por el gobierno en la formación de datos.

Los chatbots que han desarrollado gigantes web chinos como Baidu y Alibaba evitan responder preguntas relativas o relacionadas de diversas formas con Xinjiang, el Tíbet, Taiwán y la plaza de Tiananmen, o se limitan a repetir la propaganda de las autoridades. Sin embargo, a nivel oficial se niega que exista una censura sistemática, como hizo la embajada china en Washington, que criticó el informe y negó rotundamente que en China el clima en la red sea "represivo".

No obstante, la tecnología también alimenta la esperanza de cambio. El año pasado tuvieron amplia resonancia las protestas que estallaron en China contra la política "Covid cero" impuesta por el gobierno y el presidente Xi Jinping desde el comienzo de la pandemia, lo que contribuyó a cambiar el enfoque basado en pruebas masivas y rígidos confinamientos. La gente se movilizó con la ayuda de internet y los ciudadanos han demostrado capacidad de resistencia y resiliencia.

En 2024 se celebrarán elecciones en algunos de los países más importantes de la economía y la diplomacia global, en primer lugar en Estados Unidos, con la elección presidencial, en la Unión Europea, India y Taiwán, con las consiguientes implicaciones en el equilibrio con China y las perspectivas de conflicto. En este contexto, analistas, expertos y activistas observan con atención las dinámicas internas, sobre todo en lo que se refiere a los posibles efectos de la desinformación y las fake news que se difunden a través de Internet.