Iglesia vietnamita a la vanguardia en pos de una Reforma democrática y multicultural en la Educación
Hanoi (AsiaNews) - Para denunciar los errores y problemas del sistema educativo en Vietnam, los padres redentoristas de Hanoi y de la ciudad de Ho Chi Minh celebraron misas y oraciones pidiendo por la sociedad civil y el país. Ayer al menos 7.000 personas entre católicos y no católicos, y centenares de miembros de la administración local quisieron presenciar las celebraciones especiales en la capital y en la ex Saigon. El centro de la batalla -promovida por estudiantes, la sociedad civil y los líderes religiosos - con la Iglesia a la vanguardia - son los criterios utilizados para rendir los exámenes de admisión a la universidad para el año académico 2015-2016 y la currícula académica, basada todavía en el modelo socialista-comunista.
Todavía hoy el sistema educativo propone un "punto de vista unilateral" indicado por el Partido, que es fuente de controversias y fuerte disgusto para los estudiantes. De acuerdo a una investigación reciente, aproximadamente el 90% de los jóvenes no tiene fe en el actual modelo, y desearía un cambio drástico, con una mentalidad abierta y disponible a la confrontación de ideas.
Entrevistados por AsiaNews, un grupo de estudiantes universitarios de la Facultad de Pedagogía confirma que “no podemos mostrar opiniones distintas, ni siquiera sobre los contenidos o sobre los métodos de enseñanza”. Particularmente en materias como Ciencias Sociales, tanto docentes como alumnos utilizan la perspectiva del Socialismo, del Marxismo y del pensamiento de Ho Chi Minh.
Los estudiantes “aman muchísimo la escuela”, cuentan los jóvenes, porque gracias a la Educación “se puede cambiar para mejor la propia vida, y ayudar a las familias y a la sociedad”. “La estructura social falla y es por una cuestión de mala fe -agregan-, llevando a la corrupción y a la degradación moral, incluso en el sistema educativo”. Algunas materias, acusan, están “politizadas” y en ellas se los obliga a aprender “teorías obsoletas y equivocadas”.
En los últimos días, el gobierno lanzó una campaña en defensa del modelo educativo, liderada por el Ministro de Educación, Phạm Vũ Luận, para quien “la reforma educativa es una "gran batalla" para el año acedémico 2015-2016. Difiere mucho a este repecto la opinión de los jóvenes, que han promovido protestas y manifestaciones frente a la sede del Ministerio. Al mismo tiempo, ellos aseguran estar plenamente disponibles para colaborar con los expertos ministeriales en una escritura en común de la reforma.
Del lado de los estudiantes están las autoridades de la Iglesia Católica vietnamita, que luchan por una reforma de corte democrático y multicultural en la enseñanza. Por otro lado, el tema de la Educación surgió también en el reciente viaje a los Estados Unidos de Mons. Joseph Nguyễn Chí Linh, obispo de Thanh Hóa, situado en la costa septentrional del país. En un encuentro público fechado el 17 de agosto el prelado recordó que “dentro del régimen totalitario vietnamita, todas las religiones -y el Catolicismo en particular- son objeto de discriminación. Los católicos no logran promover un trabajo consistente en los sectores de la Educación, la Salud...no están tan presentes en el sector de la Administración Pública, con la excepción de una escasa minoría ”.
“Sin embargo - agrega - estamos convencidos de que pronto la Nación podrá cambiar. Y esto, rápidamente. El pueblo vietnamita tendrá el derecho a participar en modo igualitario en la vida administrativa, en la política económica, social, cultural, educativa y sanitaria del país”. La construcción de la Nación, concluye el prelado, pertenece al pueblo… y las religiones volveran a adquirir el "derecho" de participar en modo activo y positivo en todos los sectores, a todos los niveles y en todas las áreas.