Hong Kong, el juez pone en duda la acusación contra Jimmy Lai de conspirar con fuerzas extranjeras

Juez Alex Lee: El magnate pro democracia recupera la libertad porque expresó su opinión y no pidió ayuda a gobiernos extranjeros. El fallo es un golpe indirecto a la interferencia de Beijing. Ofrece a los abogados de Lai la base para la estrategia defensiva. Los abogados de la ciudad están pidiendo al ejecutivo local que responda a la presión de los medios de comunicación chinos del Estado.

Hong Kong (AsiaNews) - Jimmy Lai ha expresado su opinión y no pidió ayuda a gobiernos extranjeros; también existen razones válidas para creer que no violará los términos de su liberación, razón por la cual se le ha concedido la libertad bajo fianza. Es el fundamento de la disposición del juez de la Corte Suprema Alex Lee, que ordenó la excarcelación del magnate pro democracia el 23 de diciembre. Lai estuvo detenido 20 días, la mayor parte del tiempo en una cárcel de máxima seguridad donde están alojados gánsteres y jefes del crimen local.

El propietario del diario Apple Daily, de 73 años, - una voz crítica del gobierno de la ciudad y de Beijing - está acusado de "colusión" con fuerzas extranjeras, un crimen previsto por la ley de seguridad nacional del gobierno chino. La fiscalía formuló la acusación por las entrevistas que Lai concedió a publicaciones de otros países. También está en tela de juicio el pedido que hizo allí a los gobiernos extranjeros para que sancionen a las autoridades de Hong Kong por sus medidas contra el movimiento democrático. El magnate había sido arrestado el 3 de diciembre por una acusación de fraude, y enfrenta la cadena perpetua.

Los expertos consideran que las razones que dio a conocer ayer el juez Lee proporcionan a los abogados de Lai la base para organizar la estrategia defensiva en el futuro juicio, que comienza el 16 de abril. La decisión del alto magistrado también se considera un acto de independencia del poder judicial local de la presión ejercida por Beijing.

Lai debió desembolsar cerca de un millón de euros por su liberación. Ahora se encuentra bajo arresto domiciliario, aislado por un cordón formado por la policía y se le ha prohibido conceder entrevistas, usar las redes sociales o reunirse con personalidades políticas y diplomáticas extranjeras.

La decisión de concederle la libertad fue impugnada por el fiscal: mañana la Corte de Apelación podría revocar la medida de primera instancia y ordenar que Lai vuelva a prisión. Los medios oficialistas chinos cuestionaron la decisión del Tribunal Superior; dicen que el artículo 55 de la ley de seguridad proporciona la base legal para deportar a Lai y juzgarlo en un tribunal de la madre patria. En un editorial del 27 de diciembre, People's Daily calificó a Lai como "una persona extremadamente peligrosa", afirmando que su liberación ha dañado drásticamente el estado de derecho en Hong Kong.

En una declaración publicada hoy, cinco miembros de la Law Society de Hong Kong pidieron a los periódicos oficialistas de la madre patria que detuvieran los "ataques injustificados" contra el sistema judicial de la ciudad. Al igual que sus colegas del Colegio de Abogados, otra organización local de reconocida autoridad, denuncian que la presión de los medios controlados por Beijing amenaza con socavar el derecho de Lai a un juicio justo.

Para proteger la independencia judicial de la ex colonia británica, los abogados de la ciudad solicitaron la intervención de la Secretaria de Justicia Teresa Cheng. Dudan que las autoridades judiciales de la madre patria aseguren las debidas garantías procesales en el caso de que Lai sea juzgado en China. Ellos consideran que la ley de seguridad no garantiza la "seguridad jurídica" y no tutela adecuadamente los derechos fundamentales del imputado.