Hebei: 18 años de cárcel para Sun Dawu, empresario filántropo
Se lo acusa de "crear desorden" y de delitos financieros. Crítico de la dirigencia, desde hace mucho tiempo se encuentra en el punto de mira del régimen por su apoyo a disidentes y activistas. Junto con él, condenaron a familiares y empleados de su empresa. Están atacando a los grandes grupos privados que pueden amenazar el poder del Partido Comunista Chino.
Beijing (AsiaNews) - El Tribunal Popular de Gaobeidian (Hebei) condenó ayer a 18 años de cárcel a Sun Dawu, el empresario agrícola y filántropo que terminó en la mira de las autoridades chinas por su compromiso en favor de la justicia social y el apoyo a los activistas de derechos humanos como Xu Zhiyong.
Sun fue acusado de múltiples delitos, entre ellos "crear disturbios" y organizar una recaudación de fondos ilegal. Con penas que van desde los 18 meses hasta los 12 años, los jueces también condenaron a dos de sus hijos, dos hermanos del empresario y varios empleados de su empresa.
El Dawu Agricultural and Animal Husbandry Group tendrá que pagar una multa superior a los 30 millones de yuanes (3,9 millones de euros). Las autoridades confiscaron 14 millones de yuanes (1,8 millones de euros) a la empresa agrícola, que también debe restituir un millón de yuanes (130 mil euros) que había recibido en depósito de sus propios trabajadores y otros residentes de Hebei.
En un intento por rescatar a familiares y allegados, Sun asumió toda la responsabilidad por los presuntos delitos. La defensa ya ha anunciado que tiene la intención de apelar. Según los abogados del empresario, durante la prisión preventiva la fiscalía recogió testimonios "inadmisibles", ya que fueron obtenidos mientras los acusados se encontraban en "condiciones atroces".
Protegido del Partido Comunista Chino (PCCh) en los comienzos de su éxito, Sun, de 67 años, es el fundador de un imperio agrícola de miles de millones de dólares. Hasta que fue arrestado en noviembre, el empresario utilizaba las ganancias de su grupo para promover la justicia social, especialmente en las zonas rurales más pobres de China.
Sun ya había sido juzgado por sus duras críticas contra los dirigentes del país. El ex campesino que luego se convirtió en empresario ha criticado abiertamente la política agrícola del PCC y ha ayudado a disidentes democráticos como los miembros del movimiento "Nuevos Ciudadanos". En 2019 también acusó a las autoridades de ocultar los verdaderos daños que causaron las epidemias de fiebre porcina africana.
Los analistas señalan que la condena de Sun alimentará los temores en el sector privado. Al Partido le preocupa perder el control político frente a empresarios que amasan una gran fortuna, como Sun o el fundador de Alibaba, Jack Ma. La presión del régimen contra los grupos privados no ha escatimado ni a gigantes tecnológicos del calibre de Didi y Tencent, que al igual que el imperio comercial de Ma están siendo investigados por presuntas infracciones de la normativa