Hanoi, liberada, pero obligada al exilio la conocida bloguera católica “Mother Mushroom”

Nguyễn Ngọc Như Quỳnh, de 39 años madre de dos hijos, había sido arrestada en octubre de 2016 y condenada a 10 años de cárcel acusada de “propaganda contra el Estado”. Los amigos exprimen a través de internet la alegría por su liberación: “Después de numerosos esfuerzos, la familia se reunió en un país libre”. Desde 2016, activistas y blogueros son el objetivo de una campaña gubernamental contra el disenso. Por el momento hay 129 prisioneros políticos, arrestado por haber criticado o protestado contra el régimen comunista.

Hanói (AsiaNews) – Después de 2 años de cárcel, las autoridades vietnamitas dispusieron la liberación de la conocida bloguera disidente católica Nguyễn Ngọc Như Quỳnh, con la condición que la activista se transfiera a los EEUU de América. Conocida como “Mẹ Nấm” (Mamá hongo), esta mujer de 39 años, madre de 2 hijos había sido arrestada en octubre de 2016 y condenada a 10 años de cárcel con la acusación de “propaganda contra el Estado”. La detención de la popular bloguera, comprometida en los frentes como los derechos humanos y la contaminación industrial, se atrajo las críticas y los pedidos de algunos gobiernos gobiernos occidentales y de grupos internacionales de activistas.

Los amigos de la bloguera expresan a través de internet la alegría por su liberación. Nguyen Tin anuncia que “después de numerosos esfuerzos, la familia de Nguyễn Ngọc Như Quỳnh se reunió en un país libre”. Los grupos pro-democracia todavía recuerdan a los muchos disidentes que aún están encarcelados por el régimen comunista. El pasado julio, también un conocido abogado por los derechos humanos Nguyen Van Dai y su colega Le Thu Ha fueron liberados y obligados al exilio a Alemania, cerca de unos meses después de una dura condena por el desarrollo de “actividades tendientes a derrocar al Estado”. El 5 de abril pasado, Dai fue condenado a 15 años de cárcel y cinco años de arrestos domiciliarios, mientras que Ha a 9 años de reclusión.

Según un informe publicado por la Human Rights Watch (HRW) el pasado febrero, en el país del sudeste asiático por el momento hay 129 prisioneros políticos, arrestados por haber criticado o protestado contra el régimen comunista; acusaciones rechazadas por Hanói, según la cual no hay detenidos por delitos de opinión, sino sólo criminales castigados por haber violado la ley. Vietnam ocupa uno de los grados más bajos en el mundo por la libertad de prensa:: según el índice publicado en 2017 por la Ong Reporters sans frontières está en el 175° lugar sobre 180 países.

Desde 2016, activistas y blogueros son el objetivo de una campaña del gobierno contra el disenso. Los opositores al régimen sufren cotidianamente molestias, intimidaciones, vigilancia e interrogatorios por parte de la policía y son obligados a largos períodos de detención preventiva, sin poder ver a sus abogados o familiares. también la comunidad católica pagó por su propio compromiso. Son frecuentes las duras condenas emitidas contra los activistas católicos, como lo demuestran los recientes casos de Nguyễn Văn Oai (cinco años de cárcel), Trần Thị Nga (nuove) y Nguyễn Văn Hóa (siete).