Hanói bloquea a Thich Minh Tue, el "monje errante". Se desconoce su destino
El líder budista se había hecho famoso por caminar de norte a sur de Vietnam en defensa de los derechos. Según las autoridades, que lo tienen fichado, interrumpió su marcha a propósito. Una versión que no convence a los activistas y grupos pro derechos humanos. Un congresista estadounidense apela a la Comisión de Libertad Religiosa.
Hanoi (AsiaNews) - Desde hace algunos días está rodeado de misterio el destino de Le Anh Tu, más conocido como Thich Minh Tue, el "monje errante", que se hizo famoso por haber elegido caminar de norte a sur, convirtiéndose en una voz de paz para un Vietnam tolerante y respetuoso de las libertades civiles (y de culto). Mientras tanto, Ta Duc Tri, congresista californiano de origen asiático, hizo un llamamiento por escrito a la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos (Uscirf) expresando su "preocupación" por el estado del líder budista de 43 años, al tiempo que pedía una investigación. Según la versión oficial de las autoridades de Hanoi, había dejado de caminar "voluntariamente" tras "darse cuenta" de que podía "amenazar" la "estabilidad social". En realidad, personas cercanas a él afirman que fue "obligado por la fuerza" a detener la marcha y que ahora se encuentra retenido en paradero desconocido.
Durante semanas, Thich Minh Tue había atraído la curiosidad y la atención sobre la peregrinación, seguida en las redes sociales, en retransmisiones en directo y recabando simpatías a lo largo del camino, hasta el punto de convertirse -a su pesar- en un símbolo de la batalla por la libertad (incluida la religiosa) en Vietnam. Al parecer, la policía lo detuvo, junto con decenas de "seguidores", en la provincia central de Thua Thien Hue el 2 de junio, y desde entonces no ha habido noticias ciertas. La nota oficial afirma que fue "conducido al lugar donde se suponía que debía ir", identificándolo con la provincia de Giua Lai, donde al parecer había registrado su residencia. Mientras tanto, una imagen de un policía recogiendo las huellas dactilares del monje (en la foto) se ha hecho viral en la red, aunque la policía ni confirma ni admite haber detenido al líder budista.
Recientes informes de medios de comunicación y testigos indican que el régimen comunista de Vietnam le obligó arbitrariamente a poner fin a su viaje y a cesar sus prácticas religiosas", escribió el diputado Ta Duc Tri en su carta a la Uscirf. En la misiva, que publicó en las redes sociales, subrayaba que "ha desaparecido de la circulación y se desconoce su paradero", e insistía en que el asunto confirma "la importancia de mantener a Vietnam en la lista especial de observación" por "graves" violaciones de la libertad religiosa.
Thich Khong Tanh, alto dirigente de la Sangha Budista Unificada de Vietnam (prohibida por el gobierno), declaró a Radio Free Asia (Rfa) que Tue corría el riesgo de ser castigado por las autoridades, pero que en la actualidad estaría detenido pero sin haber sufrido abusos. Podría haber restricciones, libertad condicional o reclusión en régimen de aislamiento y, si fuera necesario, las autoridades también podrían considerar la posibilidad de utilizar al monje Minh Tue [para sus propios fines]", añadió. "Sin embargo, en mi opinión, no lo asesinarán ni le harán daño".
La Sangha Budista Unificada de Vietnam, que afirma seguir reuniendo a la mayoría de la población vietnamita, fue prohibida en 1981 en Hanoi tras su negativa a someterse al Partido Comunista. El gobierno la sustituyó entonces por la Sangha Budista de Vietnam, sin conseguir, no obstante, que la "unificada" cesara sus actividades religiosas. Sus máximos exponentes, como Thich Quang Do, fueron detenidos y puestos en libertad en varias ocasiones.
El caso de Tue ha atraído la atención de activistas y grupos pro derechos humanos, entre ellos Phil Robertson, ex subdirector para Asia de Human Rights Watch (Hrw), ahora líder de Asia Human Rights and Labor, quien afirma que "nadie se cree" la "ridícula" historia del cese voluntario de la peregrinación. Continúa señalando que esta historia de represión "revela la inherente falta de confianza del Partido Comunista y del Gobierno vietnamitas en el pueblo vietnamita". "Esta paranoia se traduce", concluye el experto, "directamente en la severa represión en curso contra todas las personas y grupos independientes de la sociedad, lo que convierte a Vietnam en el peor violador de los derechos humanos del Sudeste Asiático después del régimen militar de Myanmar".
17/12/2016 13:14
05/12/2023 15:22