Gran Mufti Saudita contra el cine y conciertos: son una fuente de depravación e inmoralidad

Sheikh Abdul Aziz al-Sheikh, la máxima autoridad religiosa en el país, está en contra de las formas de entretenimiento que fomentan la mezcla de sexos. Las películas son "libertinas, obscenas, inmorales y ateas", ya que se basan en una cultura "importada". Los Conciertos promueven la promiscuidad, corrompen la moral y los valores. Un llamamiento a los ciudadanos y las instituciones: "No abrir las puertas al mal."

Riad (AsiaNews) – La música, conciertos, películas y salas de cines son una fuente de "libertinaje" y, si se tolera, se convertirían en elementos de corrupción en todo el reino saudí. Así lo ha indicado en estos días el Gran Mufti Sheikh Abdul Aziz al-Sheikh, la máxima autoridad religiosa en el país, según la cual estas formas de entretenimiento promueven la mezcla de los sexos y la reunión - ilícita - entre machos y hembras.

En una entrevista de televisión al-Majid TV, cuando se le preguntó sobre los planes futuros de la Autoridad general saudí para el entretenimiento en el tema de los conciertos y films el Gran Mufti dijo que "los conciertos y cinemas son una depravación". Añadió que en las salas se podría proyectar películas "libertinas, obscenas, inmorales y ateas", ya que se basan en una "cultura importada."

Sin embargo, con respecto a la música, Sheikh Abdul Aziz al-Sheikh, dijo que "no hay nada bueno" en asistir a los conciertos; estos lugares de entretenimiento, advierte, ya sea películas o salas de música, representan un claro "llamado a la mezcla de los sexos".

En referencia a los conciertos, él dice que "en un primer momento se habría asignado zonas exclusivas para las mujeres"; Sin embargo, en un momento posterior "hombres y mujeres terminan quedándose en un solo sector. Todo terminaría por corromper la moral y destruir los valores "del país y la fe islámica. Él no quiere decir, dijo, prohibir toda "actividad" cultural y científica, pero insta a las personas e instituciones a que "no abra las puertas al mal."

En el pasado, el líder religiosos ultraconservador máxima autoridad saudí en la ley islámica, había arremetido contra la televisión, lanzando una fatwa hacia los dramas turcos de éxito como "Nour" y "Los últimos años", programas de televisión populares y seguidos en el mundo árabe . Y ahora contra el teatro y los cinemas los marca como una "distracción" y en contra de Twitter, causa "de todo el mal y la mentira."

Las palabras del líder religioso saudí han creado conflictos y divisiones en un país joven, donde el 60% de la población menor de 30 años viven en la ciudad. Algunos están a favor, otros en contra y exigen mayor libertad y concesiones, incluso de las autoridades musulmanas más altas, así como de la familia real en el poder.

En Arabia Saudita, un reino ultraconservador sunnita wahabí, existe una clara división entre los sexos, a las mujeres no se les permite conducir y la sharia, la ley islámica, se aplica rigurosamente. En los últimos meses el gobierno ha puesto en marcha un plan de reforma y desarrollo denominado "Arabia Saudita Visión 2030", con objetivos no sólo en los campos económicos y energéticos, sino también sociales.

Uno de los objetivos es, precisamente, el desarrollo de la industria del turismo y la industria del entretenimiento, pero finalmente no se incluyó por el conflicto con la estricta observancia de las costumbres y tradiciones islámicas. Por citar sólo un ejemplo, recientemente llevado a cabo: en las últimas semanas, la Autoridad ha patrocinado y organizado muchos programas, pero uno de ellos se topó con la censura. El mes pasado, las autoridades han cancelado un show del actor y comediante estadounidense Mike Epps previsto en un primer momento en un campus universitario en el oeste del país.