Ginebra: la ONU media por la paz. En Siria se combate, y en Jordania hay emergencia de refugiados

Segundo día de coloquios “indirectos” en Suiza. Damasco da vía libre para el ingreso de ayuda humanitaria en tres ciudades que están asediadas, entre ellas, Madaya. Pero los esfuerzos diplomáticos no surten efecto en el campo de batalla. En Alepo se intensifican los combates. El rey de Jordania emite la alarma; el país está al borde del colapso.

Ginebra (AsiaNews/Agencias) – Hoy fueron retomadas en Ginebra (Suiza) los coloquios por la paz en Siria llevados a cabo por mediación de la ONU, luego de un primer encuentro llevado a cabo ayer entre diplomáticos de las Naciones Unidas y representantes de la oposición. Se trata de negociaciones “indirectas”, que no prevén un encuentro cara a cara entre ambos frentes. Durante la mañana la delegación diplomática de la ONU se reunió con representantes de gobierno; esta tarde está previsto un coloquio con la oposición, que recién a último momento aceptó sentarse en la mesa de las tratativas.

Las Naciones Unidas están a la búsqueda de un plan de paz que ponga punto final a los cinco años de conflicto en Siria, que ha causado más de 250.000 muertos y 11 millones de desplazados. Los analistas consideran que es “positiva” la presencia de ambos frentes, pero pesa mucho la falta de una representación kurda; el temor es que tampoco estos coloquios lleguen a tener resultados tangibles para la población civil.

El enviado especial de la ONU; Staffan de Mistura está ejerciendo presiones sobre el frente del gobierno, para que el presidente Bashar al-Assad suavice las condiciones en las áreas en que la población civil está siendo reducida al hambre. A este respecto, el gobierno de Damasco dio hoy vía libre para el ingreso de nuevas ayudas en tres ciudades que están siendo asediadas desde hace tiempo; una de éstas es Madaya, donde al menos ya 46 personas han muerto de hambre en diciembre pasado.

El frente que reúne a los opositores acogió con satisfacción el resultado obtenido por De Mistura. Por otra parte, entre las diferentes precondiciones puestas por los miembros del Alto comité de negociaciones (la oposición siria, HNC) para participar en los coloquios, están el pedido de dar por terminado el asedio, el fin de los ataques aéreos y la liberación de algunos prisioneros.

Mientras que la diplomacia internacional mueve (con gran esfuerzo) sus pies en Suiza, en el terreno se continúa combatiendo a muerte. Testigos locales hablan de una intensificación de los combates en Alepo, con las tropas del gobierno empeñadas en un asedio a los baluartes rebeldes en torno a la ciudad. Para los expertos parece improbable que los coloquios puedan surtir efecto, y que se concrete un plan de paz o al menos un cese del fuego, si no se frena la escalada de violencia y el drama de la población civil.

En tanto, se agrava cada vez más la emergencia de refugiados en la región. En una entrevista a la BBC, el rey jordano Abdullah emitió una alarma, subrayando que su país ha llegado “al borde del colapso”, y que ya no está en grado de sostener la ola de sirios que huyen de a cientos de miles, tratando de sortear la frontera en busca de un refugio. “Tarde o temprano –dijo- la barrera va a estallar” y la comunidad internacional “debe hacer más” para ayudar a Amman en la obra de recibir a los prófugos.

Según fuentes de las Naciones Unidas, en Jordania se encuentran al menos 635.000 refugiados; pero para Amman la cifra es muy superior, y equivale a 1,4 millones, lo cual representa alrededor del 20% de la población total.

Tanto escuelas como hospitales y el mercado laboral en Jordania están al borde del colapso. Los gobiernos europeos piden al gobierno que genere oportunidades de trabajo y posibilidades para los prófugos, pero la realidad es mucho más complicada, y se precisan inversiones y fondos para garantizar, no sólo el acogimiento de los prófugos, sino también oportunidades de trabajo a incluso para los mismos ciudadanos jordanos. Sólo el 15% de los refugiados sirios en el país tiene un permiso de trabajo, y la situación está destinada a empeorar.