Evangelización en familia y compromiso en lo social. La misión de los católicos de Thanh Hái
Ho Chi Ming City (AsiaNews)- Los padres de familia deben ser "buenos ejemplos de fe madura" y, junto a sus esposas, educar a los niños "en las materias humanísticas y en la religión". Es cuanto dice a AsiaNews el señor Son, un padre católico de la parroquia de Thanh Hái, en la diócesis de Phan Thiet, ciudad capital de la provincia de Binh Thuan, en el sur de Vietnam. El hombre cuenta que tiene 7 hijos: "Junto a mi mujer los hemos guiado al amor de Jesús, ayudándolos siempre en sus necesidades materiales y espirituales. Ahora mi hijo más grande -agrega con mucho orgullo- es sacerdote, dedicado al cuidado pastoral de una parroquia lejana de la diócesis de Phan Thiet. En este sentido los padres pueden ser parte integrante de la misión de la Iglesia local".
La parroquia de Than Hái, nacida en 1955, cuenta al menos con 5.936 fieles, muchos de los cuales originarios de las comunidades de Ba Láng y Sam Son (diócesis de Thanh Hóa), escapados en dirección sur después de los acuerdos de Ginebra de 1954 que han marcado la división en dos de Vietnam. Hoy están presentes también católicos de Quang Binh y Kien An, de la diócesis de Vinh. La contribución de ellos es preciosa, tanto en el proceso de desarrollo económico, como en la tarea de evangelización de la parroquia y de toda la diócesis.
Muchas son las realidades asociativas nacidas justamente por el compromiso de la Iglesia: la Asociación de las madres católicas, la Asociación de los padres católicos, los comités juveniles, los centro educativos, los grupos de catequistas, los Legionarios de Cristo y tantos otros aún. Cada año 40 miembros del Comité pastoral organizan clases de catecismo y cursos pre-matrimoniales para las futuras parejas en vista de las bodas.
Gracias a las contribuciones de la parroquia, al menos 3 mil niños pobres y jóvenes de la zona tienen la posibilidad de estudiar. Y, no obstante el sistema socialista y ateo promovido por el Estado, en 40 años esta parroquia ha "contribuido" a la misión de la Iglesia con 16 sacerdotes, 9 religiosos, 17 monjas y 10 seminaristas.
El señor Anh, un funcionario de la administración local, nos dice que "la mayor parte de los habitantes de Thanh Hái es católica: estoy orgullosos de ellos". Además que ser "buenos católicos" son también "buenos ciudadanos", que tienen muchas capacidades y las ponen a disposición de la comunidad, para contribuir en particular a las necesidades de los pobres de las zonas rurales. Hoy hay activos pequeños proyectos para la pesca en los pueblitos, programas de escolarización, iniciativas para prevenir las enfermedades y las dificultades sociales, sobre todo entre los jóvenes. La Comisión pastoral de la parroquia inició una actividad de beneficencia para ayudar a los niños en dificultad, ayudar a los pobres y enfermos, a los ancianos y a las personas abandonadas.