El ministerio de Asuntos étnicos brinda una esperanza de sellar la paz con las minorías de Myanmar
Durante décadas, las minorías del país han sido objeto de persecuciones y violencia. Las promesas de federalismo y autonomía han sido desatendidas. El gobierno, bajo la impronta del NLD, relanza el proyecto de “paz, desarrollo y sustentabilidad”. Pero en dicha cartera pesan las incertidumbres respecto a los roles y competencias, incluida la efectiva participación en el proceso de pacificación.
Yangon (AsiaNews/Agencias) – Ignoradas, cuando no directamente perseguidas durante décadas por la junta militar y por el gobierno civil “a medias” -que condujeron la nación de Myanmar desde su independencia en 1948 hasta el mes de noviembre pasado-, ahora las minorías étnicas miran con esperanza al Ejecutivo liderado por la impronta de Aung San Suu Kyi y la NLD. En el equipo de gobierno dispuesto por la dirigencia de la Liga Nacional por la Democracia se encuentra también un nuevo ministerio con competencia federal, dedicado a los Asuntos para las minorías étnicas. Sin embargo, según los expertos y las voces críticas, hasta el momento hay poca certeza acerca del rol y la verdadera incidencia que el mismo pueda tener en las políticas de gobierno.
Desde la conferencia de Panglong llevada a cabo en febrero de 1947, las minorías étnicas de Myanmar aguardan su plena integración al panorama nacional, así como la paridad de derechos con la mayoría birmana. Pero estas promesas han sido desatendidas, el federalismo y la autonomía quedaron como meras promesas impresas en el papel, y el poder quedó centralizado en la capital y en las manos de los líderes de la etnia Bamar.
Y en muchas de las zonas pobladas por minorías étnicas, los conflictos, con el pasar de las décadas, se han ido agudizando hasta transformarse en verdaderas y auténticas guerras civiles.
Por ese motivo, la NLD, durante su campaña electoral, insistió largamente en que debe haber una pacificación en estas áreas, obteniendo un amplio consenso en las urnas. En las semanas que siguieron a las elecciones, fue tomando forma la idea de un ministerio federal para los Asuntos de las minorías étnicas, surgido en el marco de las iniciativas promovidas de acuerdo a la Ley nacional de protección de la raza, que fue aprobada y entró en vigencia en febrero pasado.
Para el presidente de Myanmar U Htin Kyaw, el nuevo organismo tiene una “importancia vital para el futuro de la Unión”, que necesita “paz, desarrollo y sustentabilidad” para prosperar. Diversos líderes de las minorías étnicas alimentan dudas acerca de cuán efectiva sea la capacidad del ministerio a la hora de incidir en el proceso de paz y en otras muchas cuestiones de importancia que han quedado sin resolver.
Entre las tareas que son de su competencia, está la de favorecer el desarrollo de la literatura y de la cultura de las minorías, además de proteger sus derechos. Por su parte, para los líderes de las etnias, el objetivo primario debiera ser trabajar por el proceso de paz y reconciliación; sin embargo, al día de hoy, éste no forma parte de los objetivos que dicha cartera persigue. Tu Ja, presidente del Kachin State Democratic Party advierte que la participación en el proceso de paz es “esencial” para la “credibilidad” del ministerio.
Según Nai Thet Lwin, vice-presidente del Mon National Party y flamante ministro para los Asuntos de las minorías, el organismo “necesita un fuerte trasfondo político” y “debiera participar en el proceso de paz y en otros asuntos que se vinculan a las etnias. El principal problema sigue siendo la paz”. Según varios analistas y observadores, el político, a pesar de ser una personalidad de gran relieve, está poco familiarizado con los grupos étnicos armados, y esto podría constituir un obstáculo –al que no se puede ser indiferente- para lograr un compromiso en el proceso de paz.
Myanmar está compuesto por más de 135 etnias, que siempre han tenido dificultades para convivir de manera pacífica, en particular con el gobierno central y su composición mayormente birmana. En el pasado, la junta militar uso una mano férrea contra los más revoltosos, como los Kachin que pueblan el territorio homónimo en el norte del país, a lo largo de la frontera con China; más recientemente, ha estallado un nuevo conflicto entre soldados y rebeldes Kokang en el Estado de Shan, lo cual ha llevado al Ejecutivo a declarar el estado de emergencia.
01/09/2021 15:28
31/08/2016 10:50
10/03/2017 10:47
04/05/2022 12:59