El gobierno chino lanza una ofensiva contra las 'falsas' estadísticas de las provincias
Es necesario tener un panorama real de la economía local para mantener el crecimiento y la estabilidad social. Ya sancionaron a 278 funcionarios y 787 empresas. Los dirigentes locales manipulan los datos para obtener promociones políticas. Deuda "oculta" de las provincias entre 5.600 y 7.400 millones de euros. Las críticas de Li Keqiang
Beijing (AsiaNews) - El gobierno central ha lanzado una ofensiva contra las estadísticas económicas de las provincias, a menudo falsas e infladas. Cuando la emergencia pandémica sigue amenazando el crecimiento y la estabilidad social, las autoridades nacionales necesitan un panorama real de la situación local para formular políticas eficaces.
Muchos observadores, especialmente externos, cuestionan la confiabilidad de los datos económicos chinos. Las cifras oficiales - casi siempre positivas - a menudo contrastan con la situación real en la que se encuentran las pequeñas empresas y los ciudadanos de a pie. El producto interno bruto, la deuda, el empleo y la renta privada son los parámetros a los que más apuntan los críticos.
Como informa el South China Morning Post, desde septiembre la Oficina Nacional de Estadísticas ha realizado dos series de inspecciones en 12 provincias. Resultado: 278 funcionarios penalizados y 787 empresas sancionadas por violar la normativa estadística.
El principal problema para la recopilación de datos es que los buenos resultados en estadísticas económicas suelen ser el trampolín para las promociones políticas. Por eso los dirigentes locales tienden a manipularlas en beneficio propio. Incluso hubo casos en que el PIB combinado de las provincias superó el total nacional.
La corrupción a nivel local, con altos niveles de endeudamiento de las correspondientes administraciones, sigue siendo el principal desafío para garantizar la estabilidad política y social del país; sobre todo considerando que en 2022 el Partido Comunista de China se reunirá para otorgar, con toda probabilidad, un nuevo mandato a Xi Jinping.
En 2020, la deuda pública oficial del gigante asiático se situó en 46 billones de yuanes (6,4 billones de euros), alrededor del 45% del PBI. Sin embargo, a ello hay que añadir una deuda "oculta" de las administraciones locales estimada entre 40 mil y 53 mil yuanes (5.600 y 7.400 millones de euros).
Hace un año, el primer ministro Li Keqiang ordenó a los líderes locales "decir la verdad" sobre el estado económico de los territorios que administran, porque la única manera de que los líderes puedan alcanzar sus objetivos es crear puestos de trabajo para estimular el gasto privado y aumentar la inversión.
Li ha puesto en duda la exactitud de las cifras proporcionadas por los funcionarios locales desde que era secretario del partido en Liaoning (2004-2007). Para evaluar el desempeño económico de las provincias siempre ha preferido utilizar indicadores "indirectos", como el consumo de electricidad, el volumen de la carga comercial por ferrocarril y el importe de los préstamos bancarios, lo que The Economist ha bautizado como "Índice Li Keqiang".
El año pasado, Li sacudió los mercados al admitir que en China 600 millones de personas vivían con un ingreso mensual de 1,000 yuanes: una cifra que no se condice con la versión del gobierno de que hay 400 millones de consumidores de clase media en el país.
25/11/2020 14:11