El cardenal Parolin dialoga con el Patriarca de Moscú

de Vladimir Rozanskij

Se reafirmó la importancia de la colaboración de las dos Iglesias para sostener a los cristianos del Oriente Medio. La peregrinación de la reliquia de San Nicolás, “un pequeño ladrillo en la construcción de una relación nueva”. Hilarion: No se habló de un encuentro entre Papa Francisco y el patriarca Kirill.

Moscú (AsiaNews) - “El apoyo en común brindado a los cristianos del Oriente Medio ayudará a llevar las relaciones entre la Iglesia católica y la Iglesia ortodoxa rusa a un nivel más alto”: es lo que afirmó el patriarca de Moscú y de todas las Rusias, Kirill, durante un encuentro con el secretario de Estado vaticano Pietro Parolin, que se desarrolló ayer por la tarde en la residencia patriarcal del monasterio de San Daniel, en Moscú.

“Nuestra Iglesia participa activamente en el envío de ayudas humanitarias para las víctimas del conflicto en Siria y en los otros Estados del Cercano Oriente. Y en esta obra es muy importante contar con un apoyo más amplio de todo el mundo cristiano. Considero que las relaciones recíprocas entre la Iglesia ortodoxa y la Iglesia católica en lo que hace a asegurar ayudas humanitarias en el Oriente Medio, sería un importante factor de unificación; el hecho de tener posiciones en común nos da la posibilidad de llevar adelante juntos planes concretos en este sentido”, dijo Kirill.

El jefe de la Iglesia ortodoxa rusa recordó que en 2016 se activó un grupo de trabajo conjunto para poder brindar ayudas humanitarias, y expresó la esperanza de que la prosecución de la obra en común dé impulso a nuevos proyectos para poder socorrer a los cristianos de la región medio-oriental. “Pienso que desarrollando la colaboración en este ámbito, nosotros podemos sentar los fundamentos para proyectos en común, vinculados al sustentamiento de aquellos que sufren a causa de conflictos bélicos en el Cercano oriente”, afirmó el patriarca.

Durante el encuentro, los representantes de las dos principales Iglesias cristianas también trataron la situación de Ucrania. Según el patriarca, la Iglesia debe ser un factor de pacificación, y no inmiscuirse en el conflicto: “Cuando los seres humanos se encuentran en conflicto entre ellos, la Iglesia no puede jugar otro rol que no sea el de construir la paz. Si la Iglesia no participa directamente en el conflicto y mantiene su potencial de reconciliación, ella puede convertirse en un factor para la comprensión entre todos los hombres”.

Las dos partes han intercambiado opiniones acerca de los resultados de la peregrinación de la reliquia de San Nicolás El Taumaturgo, cuyo traslado fue acordado por el patriarca Kirill y el Papa Francisco durante su histórica reunión en La Habana en febrero de 2016. Tal como fue subrayado por el secretario de Estado vaticano, este evento ha impactado mucho sobre las relaciones entre las Iglesias.

“Este aspecto acelera nuestro movimiento hacia delante en las relaciones entre nuestras Iglesias. Por supuesto que he estado muy feliz de ver que semejante acontecimiento tuvo lugar, de cómo éste ha sido acogido por la Iglesia ortodoxa rusa, y estoy contento por los resultados que tuvo. Se puede decir que una de las consecuencias del arribo de la reliquia es el nuevo clima, la nueva atmósfera positiva, que ayuda a la comunicación entre nosotros, un pequeño ladrillo en la construcción de una relación nueva”, observó el representante de la Santa Sede.

Al concluirse el encuentro, el patriarca Kirill le regaló al Cardenal Parolin un icono de la Madre de Dios y su libro “Libertad y responsabilidad” en italiano, una compilación de sus discursos “sociales” en los cuales “se habla de las relaciones de los cristianos con los valores liberales modernos”, como explicó el metropolita Hilarion, colaborador número uno del patriarca.

Al responder una pregunta sobre un posible encuentro del Papa Francisco con el Patriarca de Moscú, Hilarion declaró que la cuestión no ha sido afrontada durante el coloquio: “Por ahora, ninguna de las dos partes ha hecho resonar esta idea. Tenemos grandes desafíos ante nosotros, que han sido identificados durante el encuentro de La Habana, y que debemos afrontar”, agregó el metropolita.